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En Lovingos, localidad anejada a la villa de Cuéllar, el torreón de una iglesia medieval preside, como un faro, el páramo habitado donde se asienta desde el mismo borde de un otero. ¿Conoces su nombre?

Hay quienes piensan que la iglesia de Sancti Spiritus o del Santo Espíritu, del siglo XII, pudo haber sido parte de una pequeña abadía [blank_start]cisterciense[blank_end]. El hecho de estar en un lugar aislado, un valle entre tesos de mediana altura y a la vera de un riachuelo, podría ser un argumento a favor de su construcción por los monjes blancos en tiempos aún convulsos en los que se hacía necesaria la presencia austera de los defensores de la verdadera fe.

En Santiuste de Pedraza, su antiguo templo parroquial, destrozado por un incendio en 1930, sigue presidiendo el cerro de los Alamillos. El templo y la aldea fueron dedicados a unos niños mártires, hermanos, degollados defendiendo su fe, en época de Diocleciano, en Complutum, la actual Alcalá de Henares. ¿Cuál era la advocación de este templo?

Hoy hemos visitado la iglesia de Santa Inés, en Bernardos, el único ejemplar románico de esta localidad. Nos acercamos a su entrada sur, como no, y vemos curiosamente dos puertas de acceso, una de las cuales ha perdido las arquivoltas de ladrillo que una vez la decoraron. Elegimos una y entramos. Nos llama la atención su suelo, construido con pizarra de la zona, por supuesto, pero es sobre todo su cabecera, simple pero armónica, lo que nos causa admiración y tristeza a la vez; apoyada en un arco de ladrillo de medio punto, deja intuir lo que fueron sus bóvedas, también en ladrillo, rodeando solo ahora un círculo de aire y luz.

Apenas un ábside y los cimientos de una espadaña; es lo que quedó de la iglesia de Santiago, románica del siglo XII, que sigue presidiendo el otero que guarda las espaldas a la villa de Ayllón. Tan sólo se mantienen en pie los muros de su ábside y parte de su muro norte, pero su imponente presencia y la belleza del paisaje que contemplamos a nuestros pies compensan con creces la visita. Fíjate en la fotografía. ¿Qué emblemático monumento de la villa de Ayllón se aprecia al fondo?

En Pajares de Pedraza, localidad anejada a Arahuetes, un viejo cementerio se camufla bajo el roquedal que protege el pueblo. Se trata de la iglesia en ruinas, posiblemente del XIII, de un antiguo despoblado, La Vega, con la advocación de las Santas Justa y Rufina. El templo conserva su bóveda, su ábside y sus muros perimetrales; sin embargo las tallas de las santas titulares se encuentran en otro templo cercano. ¿Cuál?

La iglesia de San Miguel, en el semi despoblado de Fresneda de Sepúlveda es un bello templo románico del XIII maltratado por el paso del tiempo y el uso o abuso indebido. Agoniza en silencio mostrando aún una hermosa portada y una airosa espadaña.