Consiste en enseñar y estimular mediante distintas técnicas y actividades específicas el desarrollo de los niños pequeños, tanto en el ámbito físico, como en el ámbito mental y psicológico. Es un proceso que sin importar la edad, el momento o etapa, nos acompaña durante el resto de nuestras vidas, sirve como una introducción a las actividades a realizar.
Al ser un proceso de preparación que sirve como una anticipación a los estudiantes cuando pasen al colegio. De esta manera garantiza a padres y docentes una correcta adpatación en el ambiente escolar con sus compañeros.
Ayuda a superar temores, nervios y a reforzar la espontaneidad y soltura.
Tiene como finalidad captar la atención del niño y realice las actividades planteadas.
Es un proceso gradual y progresivo, es decir llama la atención del niño de a poco con el fin de conseguir un objetivo.
Se realiza con fines educativos para mejorar la conducta del niño.
Se encarga de desarrollar 7 áreas en el niño. Comenzando con un mayor desarrollo socio-afectivo, el niño será capaz de identificar sus emociones y buscar una solución lógica y clara a cualquier inconveniente.
Los estímulos suelen realizarse a través de los sentidos: vista, tacto y oído son los enfoques fundamentales y las principales áreas en las que se basa esta técnica para captar la atención de los infantes.
Gracias al aprestamiento escolar, el niño puede tener un mayor desarrollo social y una mayor capacidad para la resolución de problemas y conflictos; esto puede evidenciarse a largo plazo.
se maximizan y evidencian a un mayor nivel todas las capacidades que el niño posee de una manera innata.
Mejorará su coordinación y se relacionará de una mejor manera con su entorno y las personas que están envueltas en él. Por último, desarrollará su capacidad tanto sensitiva, como perceptual.