Estudiaron la
naturaleza
fundamental de la
realidad.
Tales de Mileto (624-548 a.c) inició
una línea de investigación física,
propone que solo existe un
elemento, el agua que adopta
múltiples formas.
Anaximandro de Mileto (610-560 a.c)
discípulo de tales , propuso la existencia
de el ápeiron algo indefinido que podía
adoptar diversas formas.
Jenófanes de Colofón (560-475 a.c)
amplió las tradiciones crítica y
naturalista.
Pitágoras de Samos (572-496) famoso por el
Teorema de Pitagoras estableció una clara
distinción entre alma y cuerpo y mantuvo la
creencia de que las almas podían migrar de
un cuerpo a otro.
Parménides de Elea (540-475 a.c) su tesis
fundamental era "el ser es", para parménides la
apariencia era el cambio y la realidad el ser,
llegó a la conclusión de que no se debe confiar
en los sentidos, puesto que sus percepciones
son engañosas, sino en la lógica.
Heráclito de Éfeso (544-484 a.c) principal
representante griego e la filosofía del
devenir, consideraban que lo único constante
en el universo era el cambio (devenir), para
ellos los valores morales cambiaban a
medida que cambiaba la sociedad le llevó a la
conclusión de que lo permanente en el
mundo es aún menos de lo que parece.