5. Definiciones de Estado.

Este análisis que hemos realizado del Estado es eminentemente histórico, y desde una perspectiva dinámica, es el más ilustrativo, o en todo caso el más adecuado para su comprensión. No obstante, la teoría del Estado ofrece multitud de definiciones y ha sido analizado desde métodos e interpretaciones muy variadas que podríamos resumir en tres grandes grupos: · Definiciones deontológicas: Es probable que la definición finalista más acertada sea la de Hauriou, para quien el Estado es: “el régimen que adopta una nación mediante una centralización jurídica y política que se realiza por la acción de un poder político y de la idea de respublica como conjunto de medios que se comparten para realizar el bien común”. · Definiciones sociológicas: Este conjunto de definiciones pivota sobre el elemento del poder, así para Heller el Estado es “una estructura de dominio duraderamente renovada a través de un obrar común actualizado representativamente, que ordena en última instancia los actos sociales sobre un determinado territorio”. También Weber cree que no es posible definir al Estado atendiendo al fin, porque no hay un solo fin, sino que es necesario definirlo por su medio de actuación, al que se suman los restantes caracteres de la evolución histórica. · Definiciones jurídicas: Para Kelsen el Estado es la totalidad de un orden jurídico en cuanto constituyen un sistema (esto es, una unidad cuyas pautas son interdependientes) que descansa en una norma hipotética fundamental. La misma idea expresa Del Vecchio, cuando define al Estado como: “un centro común de las determinaciones jurídicas que constituyen un sistema”.