Desmontar inmediatamente después de terminar una reacción todos los equipos utilizados para evitar que se queden atascados.
Eliminar los residuos de grasa si los hubiere en juntas y esmerilados con ayuda de un trozo de papel de filtro.
Enjuagar con una pequeña cantidad de disolvente como acetona o CH2Cl2 para eliminar los restos de materia orgánica, incidiendo especialmente en la zona de las juntas esmeriladas.
¡PRECAUCIÓN! “Los
residuos orgánicos
y los disolventes que
se usen para el lavado del material deben desecharse en recipientes adecuados (clorados / no-clorados) (ácidos / básicos), nunca verterlos en el fregadero.“
Lavar el material, preferentemente, con un jabón líquido (los detergentes sólidos suelen dejar más residuos) con ayuda de una escobilla de proporciones adecuadas, de forma que el agua jabonosa llegue a todas las zonas del recipiente.
Enjuagar con abundante agua corriente.
Enjuagar con agua desionizada, ya que el agua corriente tiene disueltas sales que al secar dejarán residuos.