Nunca están enfermos, no se quejan ni se cansan, tampoco se marchan de vacaciones o pierden el tiempo con llamadas telefónicas… Son 'casi' un sueño para muchos responsables de recursos humanos: más baratos y eficaces.
Cada vez más tareas, antes reservadas a los humanos, las desempeñan ordenadores y robots. Asistimos a una nueva revolución que no contribuirá al restablecimiento del pleno empleo en ningún país, pero puede potenciar las cualidades individuales de cualquier trabajador.
Así lo desvela un estudio publicado por la Universidad de Oxford. Basándose en las 700 profesiones más comunes en Norteamérica, concluye que en un intervalo de 10-20 años, el 47% de los trabajos serán realizados por máquinas. Casi la mitad de la fuerza laboral del país. La predicción es para estados Unidos pero puede extrapolarse perfectamentet a cualquier país Europeo.
"Nuestro modelo predice que la mayoría de los trabajadores de los transportes y las ocupaciones de logística; junto con la mayor parte de los trabajadores de oficina y de apoyo administrativo; y el trabajo en ocupaciones de producción, están en riesgo" (pag 44), afirman los autores, Carl Frey y Michael Osborne.
Los investigadores han trabajado en una escala del 0 al 1; el 0 significaría "menor riesgo de automatización", mientras que el 1, "riesgo elevado de automatización". La pregunta a la que respondieron para realizar la clasificación fue: "¿Pueden las tareas de este trabajo ser suficientemente especificadas y condicionarse a un procesamiento de datos, de forma que queden controladas por un ordenador?".
Algunas de esas profesiones que los humanos, tarde o temprano, dejarán de desempeñar son operador detelemarketing, relojero, recepcionista, vendedor, vigilante, cocinero de fast-food. Tienen una probabilidad de 8 sobre 10 de ser realizadas por máquinas. También la de taxista. El gremio, en pie de guerra en varios países (España, Francia) ante la competencia de la aplicación Uber, que sufrirá un empeoramiento en el próximo decenio. A nadie se le escapan el centenar de desempeños que podría llevar a cabo el "coche sin conductor" que desarrolla Google.
"El progreso tecnológico en la historia se ha limitado a la mecanización de las tareas manuales, que requieren trabajo físico, pero el progreso tecnológico del XXI contribuirá a una amplia gama de tareas cognitivas, que, hasta ahora, se mantienen bajo dominio humano", resaltan los investigadores.
Así, el proceso tendría dos fases: en una primera oleada afectará (y ya afecta) a puestos en el en transporte, la logística, la mano de obra, las ventas y la producción. Incluso China, la referencia en términos de 'trabajo barato' asiste a la sustitución de obreros por máquinas. Ya se especula con que el próximo iPhone sea producido por 10.000 robots (FocBots).
La segunda fase, se centrará en tareas que corresponden a la ciencia, la administración y la ingeniería. Y es que las computadoras ya han sustituido a cajeros u operadores pero la "informatización" avanza hacia áreas que requieren más conocimientos o independencia.
Las máquinas tienen cada vez una mayor capacidad de aprendizaje, esa es la base sobre la que se avanza. El "machine learning" permite que avancen en el proceso de toma decisiones, aprendiendo de esquemas humanos.
Se evoluciona sí, pero hasta un límite, concluyen los dos expertos, porque las profesiones que requieren una mayor creatividad o inteligencia social"sobrevivirán" en términos humanos. Por ejemplo, los diseñadores, coreógrafos o profesores de primaria.
"Nuestro modelo predice una interrupción en la tendencia actual hacia la polarización del mercado de trabajo, con la informatización limitada principalmente a las ocupaciones de baja calificación y bajos salarios. Nuestros resultados implican que, los trabajadores poco cualificados se reasignarán a tareas que no son susceptibles de informatización, que requieren inteligencia creativa y social. Los trabajadores que quieran ganar esta carrera, tendrán que adquirir las habilidades creativas y sociales", asegura el documento.
El impacto entre los docentes dependerá mucho de quién sean sus alumnos porque para los profesores universitarios sí existe un mayor grado de 'amenaza', o al menos, la forma más clásica de impartir conocimientos. Internet y el hecho que cada vez se comparten más conocimientos en línea ya están transformando la forma de dar clase.
También en el gremio médico habrá más cambios aunque precisamente por el 'factor humano', muchas profesiones médicas quedan prescritas para las máquinas: ortodoncista, fisioterapeuta, practicante, enfermero, logopeda, dentista, psicólogo o cirujano. Y no sólo ellos se mantendrán, también los sacerdotes o los psicoterapeutas, cuyas funciones requieren un alto grado de empatía, permanecerán en nuestro terreno.