En esta última etapa hay que hacer hincapié en finalizar el ejercicio con unos minutos de actividad física de suave intensidad para así favorecer la recuperación.
Estirar es un componente clave de esta etapa, puesto que evita lesiones liberando la tensión sometida a los músculos durante el ejercicio realizado.
Hidratarse después del ejercicio es favorable para recuperar el agua liberada en forma de sudor.