Son el reflejo de la contabilidad de una empresa y muestran la estructura económica de ésta. En los estados financieros se plasman las actividades económicas que se realizan en la empresa durante un determinado período.
Muestran el ejercicio económico de un año de la empresa. Las cuentas anuales permiten a los inversores supervisar si la empresa tiene una estructura solvente o no y, por tanto, analizar si es rentable invertir en ella o no.
Comprensibilidad. La información presentada en los estados financieros debe ser fácil de entender, para accionistas, empleados, instituciones públicas o posibles inversores etc.
Relevancia. En este punto la información debe tener mucha importancia, puesto que si se llegara a omitir podría significar un resultado del estudio de la empresa radicalmente distinto. Por ende, se debe reunir información relevante y eliminar la que no es valida.
Fiabilidad. La neutralidad y la ausencia de costos de agencia deben ser la bandera de los estados financieros.
Comparabilidad. Si queremos sacar conclusiones con periodos anteriores, la información debe carecer de cierta homogeneidad, tanto en los tipos de datos mostrados como en la forma de representarlos.
Pertenencia. Cumpliendo las anteriores características, los estados financieros deberían cumplir con las expectativas de los agentes o usuarios que puedan solicitarlos.
Su principal objetivo es brindar información sobre la situación financiera de la empresa, el rendimiento y los flujos de efectivo de la empresa que sea útil para tomar cualquier decisión económica de una amplia gama de usuarios que no están en condiciones de exigir informes a la medida de sus necesidades específicas de información.