La atención es la encargada de realizar el proceso de selección de la información dentro del sistema nervioso, siendo el elemento fundamental que articula todos los procesos cognitivos. Las alteraciones de la atención siempre producen trastornos cognitivos de mayor o menor intensidad.
La estructura de la atención y su nivel jerárquico.
La estructura de la atención está constituida por diferentes estratos jerárquicos de mayor o menor complejidad, que se articulan en forma de redes neurales situadas en diversas estructuras nerviosas.
La estructura de la atención
Su nivel jerárquico.
La estructura supramodal de la atención se articula en tres niveles de complejidad creciente: estado de alerta, atención sostenida y atención selectiva.
Estado de alerta
Permite que el sistema nervioso disponga de suficiente capacidad para la recepción inespecífica de las informaciones externas e internas. Consta de dos componentes: atención tónica y atención fásica.
La atención tónica es el umbral de vigilancia mínimo que se necesita para mantener la atención durante la realización de una tarea prolongada.
La atención fásica es la capacidad para dar una respuesta rápida ante algún estímulo relevante que se presenta de manera sorpresiva e inesperada. Se trata de una respuesta biológica inespecífica que activa los circuitos talámico-frontales y las áreas amígdalinohipocámpicas.
Atención selectiva
Atención sostenida
Una vez que se dispone de suficiente nivel de activación para permitir el acceso de informaciones al sistema nervioso, entra en juego el proceso de atención sostenida, que es la capacidad mediante la cual el foco atencional se puede mantener resistiendo al incremento de la fatiga y a las condiciones de distractibilidad.
Es la capacidad para seleccionar y activar los procesos cognitivos sobre aquellos estímulos o actividades que interesan, anulando los que son irrelevantes. Se trata, por tanto de un proceso activo que en gran medida depende de las motivaciones e intereses de cada persona.
FOCALIZADA: Permite el procesamiento de determinados estímulos, mientras se ignoran otros.
SOSTENIDA: Capacidad para mantener una respuesta conductual mediante la realización de una actividad repetida y continuada durante un período de tiempo determinado.
ALTERNANTE: Capacidad para cambiar el foco de atención desde un estímulo a otro, desplazándolo entre varias tareas que exigen distinta respuesta cognitiva, pero ejerciendo un control para que la información se atienda de forma selectiva.
SELECTIVA: La atención selectiva permite prestar atención a las características del ambiente que son relevantes para la conducta dirigida a metas, excluyendo otros estímulos.
DIVIDIDA: Capacidad para responder simultáneamente a diferentes estímulos y tareas o a demandas diferentes durante la realización de una misma tarea.
EXCLUYENTE: Capacidad para producir una respuesta inhibiendo otras que no son relevantes para el logro de metas, lo que exige la ignorancia de estímulos irrelevantes para la realización de una tarea.
Modelos de atención
La complejidad de los procesos atencionales ha propiciado el desarrollo de distintas formulaciones de la atención desde distintos ámbitos conceptuales procedentes de la Neurociencia y la Psicología Cognitiva. A pesar de las múltiples modelos existentes, actualmente sigue sin existir pleno consenso sobre la estructura y el procesamiento de la atención.
Modelo de Broadbent: Según este autor, destaca la naturaleza selectiva de la atención ya que el organismo se ve forzado a elegir entre variedad de estímulos sensoriales competidores que alcanzan los distintos receptores sensoriales.
Modelo de Norman y Shallice: El modelo propuesto por Norman y Shallice (1980) distingue dos modalidades de análisis perceptivo, interviniendo el procesamiento automático y el controlado. Cuando un estímulo llega a la base de datos atencional, operan dos sistemas, uno que regula los automatismos atencionales, denominado programa de arbitraje o contención y otro relacionado con el procesamiento controlado, denominado Sistema Supervisor de Atención (SAS), que se encarga de planificar, dar respuesta y supervisar la atención ante situaciones novedosas, infrecuentes o distintas.
Modelo de Mesulam: Mesulam (1985) propone un modelo de atención constituido por cuatro componentes (Figura 5.1): a) Sistema reticular, relacionado con el mantenimiento del nivel de alerta y vigilancia. b) Sistema límbico y giro cingulado, responsables de los aspectos motivacionales de los procesos atencionales. c) Sistema frontal, responsable de coordinar los programas motores. d) Sistema parietal encargado de realizar la representación o mapa sensorial interno.
Modelo de Posner y Petersen: El Modelo de Atención propuesto por Posner y Petersen (1990) está constituido por dos sistemas anatómicos: posterior y anterior, interconectados entre sí formando parte de un circuito neural córtico-estriado-talámico. Según este modelo existe una jerarquización de la atención, de tal modo que el sistema anterior ejerce control sobre el sistema posterior, siempre cuando no esté ocupado con el procesamiento de otro material.
Modelo de Stuss y Benson: Según estos autores (Stuss y Benson, 1995), la atención se procesa a través de un sistema frontal-diencefálico-troncoencefálico, que incluye: a) Sistema reticular activador ascendente, que está relacionado con los niveles tónicos de alerta. b) Proyecciones talámicas difusas que están implicadas en los cambios fásicos del nivel de alerta. c) Sistema fronto-talámico, que está bajo la influencia del sistema reticular activador ascendente.
Bases neurales de los procesos atencionales
El procesamiento neurofisiológico de la atención pasa por diversas fases, implicando la actividad de varias estructuras neuroanatómicas situadas a lo largo del tronco cerebral y el
cerebro, siendo la corteza asociativa el final de trayecto de los procesos atencionales.
Asimetrías cerebrales para el control de la atención
Las asimetrías cerebrales consisten básicamente en las diferencias funcionales que hay entre los dos hemisferios cerebrales, dejando claro que Incluso cuando son de tamaño casi idéntico y muy parecidas los dos hemisferios no se utilizan de la misma manera y tienen diferentes funciones.