En este capítulo el autor hace una crítica a la sociedad mexicana, comienza explicando
y analizando la conquista, expresa cómo se fue dando y también cuales fueron los
resultados de los acontecimientos que se dieron en aquel tiempo. Crítica a la religión
católica romana, quien fue la que colonizó y cambio las creencias de cultura nativa que
habitaba en el país antes de la llegada de los españoles.
Al llegar los españoles al nuevo continente,
encontraron una civilización perfectamente
estructurada: Mesoamérica.
Lo que eventualmente seria la Nueva España, comprendía el
centro y sur del actual México y parte de Centroamérica,
además, se encontraba poblada con distintas culturas
peleadas entre sí y con enemigo común: los Aztecas
Por eso al arribo de los españoles, todos los pueblos sometidos por
los Aztecas, vieron una posible liberación, por lo que muchos
no oponían resistencia
Algunos como los
Tlaxcaltecas se aliaron a
Cortés.
Para los españoles la
meta, era Tenochtitlan
Para los españoles la meta era
Tenochtitlan
En Tenochtitlan todos esperaban el regreso de
Quetzalcóatl, es por eso que Moctezuma y el pueblo
recibe a Cortés con presentes.
Cortes, con un puñado de hombres, abusa de la
hospitalidad que les brindan y realiza la conquista más
absurda de la historia, según Octavio Paz.
Los aztecas, al ver la conquista y la
colonización, sienten que los dioses en los
que ellos creen los abandonaron, los
dejaron a la deriva.
Ningún pueblo se sintió tan
desamparado como ellos. Por eso
cuando Cuauhtémoc se enfrenta al
invasor, pero se enfrenta sabiendo
de antemano su derrota.
España era por aquel entonces una nación medieval, que
tomó su lugar en la Europa renacentista, debido a su
“descubrimiento”. Por esa razón España aplica y adapta,
pero no inventa, según Octavio Paz.
Por otra parte, el catolicismo se convierte en el corazón de
la Nueva España y los indígenas, conscientes de su
desamparo, encuentran un refugio en esta, por eso,
aquella religión cumplió con ser una unión en la sociedad.
De allí que la religión católica haya cumplido un papel
cohesionador.
La Nueva España, no sobresalió por un
arte, mito o pensamientos originales.
Pero quizás es Juana de Asbaje , la
figura más representativa de la colonia.
Cree en Dios, pero siempre busca una
explicación racional de las cosas
Sor Juana Inés de la Cruz Poeta,
monja jerónima, autora dramática y
profundamente adelantada a su
tiempo. Representa la más pura
reflexión intelectual.
Pero ella, como hija del orden colonial, vivirá la
doble soledad: la soledad de la mujer y de la
intelectualidad. Es esto lo coloca como la
primera mujer moderna de México.
Como es de esperarse Sor Juana
acabará por guardar silencio y acatar
el rol que se le ha impuesto.