Organización y planificación del personal: consiste en
planificar las plantillas de acuerdo con la organización de la
empresa, diseñar los puestos de trabajo oportunos, definir
funciones y responsabilidades, prever las necesidades de
personal a medio y largo plazo, analizar los sistemas
retributivos y de promoción interna, entre otras tareas.
Reclutamiento: son el conjunto de procedimientos encaminados a
atraer candidatos competentes para un puesto de trabajo a la
empresa. Estas técnicas de reclutamiento pueden ser internas, si
consisten en captar candidaturas de personas que forman parte de
la plantilla de la empresa, o externas, si los candidatos son
personas ajenas a la organización.
Selección: esta función es muy importante, ya que uno
de los factores determinantes del éxito de una actividad
empresarial es la correcta elección de las personas que
han de trabajar en la empresa. Se debe realizar un
análisis completo de todo lo que el candidato aporta al
puesto de trabajo y para ello este ha de pasar por una
serie de pruebas de selección
Planes de carrera y promoción profesional: el desarrollo del
personal puede implementarse a través de planes de carrera;
programas en los cuáles las personas pueden adquirir la experiencia
necesaria para luego estar en condiciones de progresar en la
estructura de la organización
Formación: la formación de los trabajadores permite al personal
de la empresa adaptarse a los cambios que se producen en la
sociedad, así como a los avances tecnológicos. Además de la
adaptabilidad a los cambios, la empresa debe facilitar formación
para la tarea específica que se ha de realizar dentro de la misma
en función de sus objetivos y planes
Evaluación del desempeño y control del personal: desde
recursos humanos han de controlarse aspectos como el
absentismo, las horas extraordinarias, los movimientos de
plantilla, la pirámide edad o las relaciones laborales,
además de corregir los desajustes entre las competencias
del trabajador y las exigidas por el puesto.
Clima y satisfacción laboral: es necesario detectar el nivel de
satisfacción del trabajador dentro de la organización y los motivos
de descontento, con la intención de aplicar medidas correctoras.
Uno de los factores que mayor y mejor incidencia tienen en la
consecución de un buen clima laboral es la conciliación de la vida
laboral y familiar.
Administración del personal: consiste en gestionar
todos los trámites jurídico-administrativos que
comporta el personal de la empresa, englobados en
ámbitos como la selección y formalización de contratos,
tramitación de nóminas y seguros sociales y control de
los derechos y deberes del trabajador.
Relaciones laborales: se trata de promover la comunicación entre
la empresa y sus empleados, utilizando a los interlocutores de
estos, que son los representantes sindicales (comités de empresa,
delegados de personal o enlaces sindicales). Estos representantes
deben ocuparse de las condiciones colectivas del trabajo, como la
negociación de convenios colectivos o los conflictos que se
puedan originar en la empresa y sus vías de solución.
Prevención de riesgos laborales: el estudio de las
condiciones de trabajo y de los riesgos laborales
asociados preceden a la implementación de medidas de
prevención y de protección, a fin de preservar la salud de
las personas que trabajan en la empresa.