El constructivismo es una corriente pedagógica basada en la teoría del conocimiento constructivista, que postula la
necesidad de entregar al estudiante
propone un paradigma donde el proceso de enseñanza se percibe y se lleva a cabo como un proceso dinámico,
participativo e interactivo del sujeto, de modo que el conocimiento sea una auténtica construcción
La perspectiva constructivista del aprendizaje puede situarse en oposición a la instrucción del
conocimiento. En general, desde la postura constructivista, el aprendizaje puede facilitarse, pero
cada persona reconstruye su propia experiencia interna
La diferencia puede parecer sutil, pero sustenta grandes implicaciones pedagógicas, biológicas,
geográficas y psicológicas. Así, esto aplicado a un contexto de aula con alumnos significa que desde
un enfoque constructivista puede crearse un espacio favorable al aprendizaje