Son un conjunto de moléculas orgánicas, compuestas principalmente por carbono e hidrógeno y en menor medida oxígeno, también pueden
contener fósforo, azufre y nitrógeno. Su característica principal el ser hidrófoba (insolubles en agua) y solubles en disolventes orgánicos como la
bencina, el benceno y el cloroformo.
Los lípidos forman un grupo de sustancias de estructura química muy heterogénea, dada la diversidad de características
químicas, su clasificación:
Lípidos saponificables:
Contienen ácidos grasos en su molécula y
producen reacciones químicas de saponificación.
Lípidos simples: Son aquellos que sólo contienen carbono, hidrógeno y oxígeno. Se subdividen a su vez en: Acilglicéridos o grasas y Céridos o ceras. Lípidos complejos: Además de contener en
su molécula carbono, hidrógeno y oxígeno, también contienen otros elementos como nitrógeno, fósforo, azufre u otra biomolécula como un glúcido. También se les llama lípidos de
membrana pues son las principales moléculas que forman las membranas celulares: Fosfolípidos y Glicolípidos.
Lípidos insaponificables:
No poseen ácidos grasos en su estructura y no producen reacciones desaponificación.
Entre los lípidos insaponificables están: Terpenos, Esteroides y Prostaglandinas.