El acto de sentir no es solamente algo físico, sino subjetivo, depende directamente de la realidad material o física
Se asocian a los sentidos, los cuales se clasifican en:
Los sentidos objetivo
Comprenden la vista y el oído, y son denominados así porque el objeto al que se dirigen está separado físicamente del sujeto
Los sentidos objetivo-subjetivos
El tacto, gusto y olfato, que tienen que estar en contacto directo con el objeto para que sean estimulados
El proceso psicológico de la sensación
el medio físico en el que Encuentra la persona produce un estímulo físico de tipo electromagnético, químico o mecánico que impacta en los sentidos alterándolos.
Para afectar a un órgano sensorial tiene que superar una barrera a la que se denomina umbral.
Hay tres tipos de umbrales: inferior, superior y diferencial.
Es el proceso cognoscitivo por el que captamos de forma unitaria, integrada y estable los elementos físicos y sensibles que nos proporcionan los sentidos.
Algunas de las leyes que rigen esta actividad son las siguientes:
La proximidad espacial
Los estímulos que comparten alguna semejanza
La percepción tiende a dar continuidad
El destino común
La ley de cierre
La ley de figura-fondo
La percepción nos permite, por ejemplo:
Establecer la constancia de la forma de un objeto
Establecer la constancia del tamaño de los objetos
Percibir el espacio y la profundidad
Percibir el movimiento
Percibir el tiempo a través de factores como la sucesión