El término “bioética” fue utilizado por primera vez por V. R. Potter hace poco más de treinta años
(Potter, 1970). Con este término aludía Potter a los problemas que el inaudito desarrollo de la
tecnología plantea a un mundo en plena crisis de valores
Urgía así a superar la actual ruptura
entre la Ciencia y la Tecnología de una
parte y las Humanidades de otra.
Ésta fisura hunde sus raíces en la
asimetría existente entre el
enorme desarrollo tecnológico
otorga al hombre el poder de
manipular la intimidad del ser
humano y alterar el medio
SE DIVIDE EN TRES
Bioética y ética médica
La ética médica no es sólo una parte de la
bioética, sino que goza además de especial
relevancia en el conjunto de la nueva
disciplina
Por la riqueza de su tradición científica y
humana - ausente en el resto de la bioética-
posee un especial valor que no puede ser
ignorado
La pretensión ilusoria de construir una
“ética nueva” que habría de romper con
la ética tradicional no sólo carece de
fundamento sino que deja traslucir una
notable ignorancia.
Ciertamente la bioética – y con ella la ética médica- afronta
hoy problemas nuevos, pero cuenta con los mismos medios
de siempre para resolverlos: el uso juicioso de la razón y la
luz de los valores y principios
Formación en bioética
Se comprende que sólo una formación pluridisciplinar a la
vez teórica y práctica permitirá adentrarse en esta
disciplina si se quiere evitar la frivolidad de confundir el
diálogo bioético con un mercado de opiniones livianas.
si en algunos ambientes la bioética no ha
conseguido la reputación y autoridad que
merece se debe quizás a la falta de preparación
y de prestigio de quienes indebidamente se
constituyen en "expertos" y maestros de
bioética.
es necesario que quien pretenda formarse opiniones
sólidas es este campo profundice en el conocimiento del
ser humano y de los dilemas científicos y tecnológicos
actuales, especialmente en los propios de la medicina
asistencial y de la investigación clínica y biológica.
La bioética nace además con pretensiones de
globalidad. Desea ayudar a resolver un conflicto que
existe dentro de cualquier cultura moderna
División de la bioética
Podemos dividir la bioética en una parte general
o fundamental y una parte especial o aplicada
bioética general se ocupa de los fundamentos éticos, de los
valores y principios que deben dirigir el juicio ético y de las fuentes
documentales de la bioética (códigos médicos, derecho nacional e
internacional, normas deontológicas y otras fuentes que
enriquecen e iluminan la discusión, como las biográficas, literarias
o religiosas)
bioética especial se ocupa de dilemas específicos,
tanto del terreno médico y biomédico como
referentes al ámbito político y social: modelos de
asistencia sanitaria y distribución de recursos, la
relación entre el profesional de la salud y el
enfermo,