Este principio requiere que se utilicen los medios de que se
dispone: armas, defensas, grilletes..., con la intensidad adecuada
para cumplir el cometido asignado, de acuerdo con los principios
básicos de actuación en el empleo de la fuerza.
Que se produzca la menor lesividad
posible
Esta necesidad, de forma general y en abstracto, debe entenderse como que el uso de la fuerza sea
imprescindible para cumplir las misiones asignadas al militar, y que de no ser así quedarían
incumplidas. Igualmente la necesidad del uso de la fuerza debe aplicarse de manera concreta ante
cada situación. Esto significa que dicho uso sea preciso y adecuado al fin que se persigue en cada
momento y desde un punto de vista lo más amplio posible
PRINCIPIOS BÁSICOS DE ACTUACIÓN EN EL EMPLEO DE LA FUERZA
Legalidad
Necesidad
No discriminación
Humanidad
Oportunidad
Congruencia
Proporcionalidad
EMPLEO GRADUAL DE LA FUERZA
NIVELES DE RIESGO
Nivel de normalidad
Nivel de alerta
Procedimientos de demostraciones de fuerza no letal
Procedimientos de advertencias imperativas
Nivel de peligro
Nivel de alto riesgo
Procedimientos de demostraciones de fuerza letal
Procedimientos de empleo de fuerza letal
Procedimientos de empleo de fuerza no letal
Procedimientos de demostraciones de fuerza letal
Procedimientos de disuasión por la presencia e imagen
PROCESO DEL EMPLEO DE LA FUERZA
1. Observar el entorno e identificar la amenaza. Si es posible,
confirmarla (señales de advertencia, láser, luces, etc.)
2. Valorarla en función de los posibles efectos que puede producir
(nivel) y las capacidades propias de neutralizarla
3. Decidir si debe emplearse la fuerza (principio de
oportunidad)
4. Elegir el medio apropiado (principio de congruencia)
Oportunidad
5. Decidir el efecto que se desea producir (intención letal o no letal,
principio de proporcionalidad)
6. Intervenir, evaluando permanentemente los puntos anteriores hasta resolver
la situación
7. Vuelta a la normalidad, incluye prestar o solicitar asistencia sanitaria si fuera necesario (principio
de humanidad)