Está perfectamente capacitada para hacer un balance de lo que sabemos sobre los rasgos generales
de esta transformación mundial. Tiene el cometido de promover el trabajo decente. El análisis de los
cambios es vital para comprender cuáles son las fuerzas que guían este proceso, a fin de modelarlo
de tal manera que genere más y mejores puestos de trabajo para los trabajadores de ambos sexos
de todo el mundo
El trabajo decente como objetivo mundial: En el trabajo decente se sintetizan las aspiraciones que
todos tenemos en nuestra vida laboral: oportunidades e ingresos; derechos, participación y
reconocimiento; estabilidad familiar y desarrollo personal, y justicia e igualdad de género. En
definitiva, estas distintas dimensiones del trabajo decente son el sustrato de la paz para las
comunidades y la sociedad.
Fuerzas formidables e interrelacionadas
Están ejerciendo una gran influencia en las modalidades de empleo, las condiciones de trabajo, los
sistemas de seguridad social y la adaptación de los mecanismos de gobernanza.
Necesidad de una vía de
desarrollo mundial más justa
Reducción de la extrema pobreza. Crece la brecha del
ingreso entre países más ricos y países más pobres
Una causa de la desigualdad mundial es el
crecimiento sostenido de la fuerza de trabajo en
los países en desarrollo
Los países más ricos y el envejecimiento de
su fuerza de trabajo
Proceso de innovación y difusión de las nuevas tecnologías de la
información y la comunicación (TIC)
Transformación radical de los medios de producción, distribución e intercambio
Este proceso ya ha afectado profundamente el comercio y las inversiones internacionales, los
movimientos de capitales y de fuerza de trabajo, y muchos procesos laborales y productos
Los efectos directos de las TIC sobre el empleo son, por una parte, la creación de puestos de trabajo
en la producción y prestación de nuevos productos y servicios, y, por otra, la destrucción de empleos
en el ámbito de las tecnologías que quedan obsoletas o en las empresas que no logran seguir el
ritmo de innovación de sus competidores
El potencial productivo de las TIC depende de una demanda dinámica, del desarrollo de los recursos
humanos y del aprovechamiento de las redes