1. Diseño: FODA En 1957 Selznick presentó la escuela de gestión estratégica llamada de diseño. Reflexiona ante
cada situación para luego crear estrategias singulares y creativas. Esta escuela, inspirada en la arquitectura, se
recomienda para organizaciones con algún tipo de formalización previa y ciertas mecánicas internas establecidas,
o bien para decisivas etapas de refundación en el caso de empresas informales. El estratega tendrá que ejercer
un liderazgo dominante, unitario y planificado con los directivos, en busca de un cambio súbito y profundo en la
organización.
2. Planificación: Presupuestos En 1965 Ansoff presentó la escuela de gestión estratégica de planificación.
Esta estrategia primero prevé para luego ver los resultados. Esta estrategia se recomienda para una
organización centralizada, bien formalizada y ordenada en divisiones, pues el estratega controlará la
variabilidad de ciertos factores claves en una lista que confeccionará preliminarmente. El estratega
desarrollará planes de trabajo sucesivamente descompuestos en subestrategias y programas específicos, al
punto de que cada integrante de la empresa se convierta en un planificador de su propio trabajo. De esta
manera se logrará un cambio periódico y progresivo en la organización que se busca perfeccionar.
3. Posicionamiento: Análisis competitivo La escuela de gestión estratégica de posicionamiento fue presentada
a mediados de los años 70 por Schendel, basándose en disciplinas como la historia militar, la organización
industrial y la economía. Evalúa los elementos con que se cuenta para competir y llevar a la organización a
su mejor rendimiento. Esta escuela es adecuada para una organización estructurada y de rendimiento
simple, estable y consolidado en el tiempo, sobre la cual el estratega pueda cuantificar beneficios, costos,
ganancias y pérdidas. También es útil en empresas segmentadas y globales para la evaluación de sus
procesos internos. Cualquier organización que tenga ventajas competitivas se adapta a este liderazgo para
producir cambios graduales en la organización.
4. Empresarial: Visión La escuela empresarial fue presentada por Schumpeter. Esta estrategia centraliza el
poder en un líder carismático, positivo y al mismo tiempo audaz para decidir intuitivamente las acciones
necesarias para conducir o mejorar la empresa. Esta escuela de estrategia es adecuada para un escenario
simple y focalizado en el emprendedor, que necesita un carácter dinámico y a la medida del líder de la
organización: la etapa de creación de una empresa, empresas pequeñas, o bien para transformar por
completo una empresa de estructura demasiado pesada. El liderazgo del estratega debe estar marcado por
un carácter dominante, ágil, intuitivo, de cooperación ocasional y oportunista, aunque también necesita
sólidas observaciones sobre el entorno para producir un cambio revolucionario, rápido e innovador.
5. Cognoscitiva: Mapa interpretativo El norteamericano Simon presentó en 1947 la escuela cognoscitiva con
una declaración de intenciones: “lo veré cuando lo crea”. Interpreta la realidad según los mapas de
soluciones y esquemas interpersonales que resuelvan los problemas. Esta escuela ha tenido éxito entre
seguidores de los sistemas de información, filósofos y profesionales vinculados al psicoanálisis. Las
propuestas cognoscitivas son adecuadas en escenarios altamente complejos y con cierta estabilidad, para la
etapa de concepción de una empresa, aunque también para la transformación a gran escala de empresas, así
como para motivar equipos estancados. En este caso se exige como liderazgo que el estratega desarrolle un
trabajo mental de análisis o de proposición creativa en torno a las fortalezas y debilidades de cada individuo
que trabaja en la empresa, para luego cambiar los hábitos mentales del grupo.
6. Aprendizaje: Estrategia emergente La escuela de gestión estratégica de aprendizaje que inauguró Lindblom
en 1959 se inspira en la psicología, la educación y las matemáticas. Plantea aprender nuevas herramientas
para darle sentido a las labores de la empresa. Esta escuela es adecuada en escenarios complejos e
imprevisibles –organizaciones muy específicas, negocios novedosos o grandes corporaciones
descentralizadas–, sobre todo en etapas de transición o eventualidades traumáticas sin precedentes. El
liderazgo del estratega debe ser sensible al aprendizaje propio y de los demás, para promover los cambios
continuos, graduales y progresivos que exige el proceso de aprendizaje.
7. Poder: Negociación A partir de 1971 Allison dio a conocer la escuela de gestión estratégica del poder,
según principios de las ciencias políticas y la negociación. Dentro de los grupos un líder debe apropiarse de
aquello que sea más valioso. Esta gestión se adecua a un entorno donde impere la agresividad y las malas
prácticas, por ejemplo organizaciones divididas, desafíos políticos, bloqueos económicos y culturales, o
empresas que se han propuesto dominar su segmento de mercado. El liderazgo del estratega deberá utilizar
su agresividad, estratagemas encubiertas y acciones cooperativas, para transformar gradualmente la
organización que está gestionando.
8. Cultural: Valores La escuela de gestión estratégica cultural fue presentada por Rhenman y Normann a
fines de los 60 en Suecia, basándose en elementos de la antropología para interesar a personas con
sensibilidad social y espiritual. Intenta conservar y perpetuar los logros organizacionales. Esta gestión rescata
los valores, las convicciones y los mitos que unen y dan sentido a una situación organizacional. El estratega
cultural ejerce un liderazgo centrado en la importancia que los grupos humanos y los individuos dan a sus
símbolos, para producir cambios ideológicos en la estructura colectiva.
9. Ambiental: Evolución Por su parte, la escuela de gestión estratégica ambiental dada a conocer por
Hannan y Freeman en 1977 señala que en las relaciones humanas “todo depende”. ¿Y de qué depende? Del
ambiente en que se desenvuelven las organizaciones y de la adaptabilidad de sus componentes. Para
pertenecer a una organización es necesario adaptarse a ella y no confrontarla. Esta escuela es adecuada para
las etapas finales de instituciones o empresas, cuando su ciclo vital se acerca al final. El estratega ambiental
se enfrenta a liderazgos improductivos que contrastan con la exigencia de la organización, y busca modificar
hábitos muy arraigados buscando progresos graduales.
10. Configuración: Revolución Finalmente, en 1962 Chandler presentó la escuela de gestión estratégica
llamada de configuración, que plantea agrupar las fuerzas para revolucionar las estructuras. Esta escuela
–inspirada en la Historia– se recomienda para organizaciones en constante cambio, empresas que requieran
revitalización o transformación. El estratega tendrá que ejercer un liderazgo categórico y prescriptivo, como
agente de un cambio revolucionario.
ENFOQUES QUE AGRUPAN LAS ESCUELAS DE PENSAMIENTO ESTRATÉGICO
Estrategia Versus Recursos
Annotations:
Pensamiento Estratégico puede verse privilegiando la visión, la misión y los objetivos; desarrollándose luego el plan estratégico en un contexto enunciativo de la visión que tiene la organización. Estos primeros pasos constituyen el fundamento para la determinación de los recursos suficientes y necesarios para proceder a su asignación y consecuente ejecución.
Todo esto, se consigue en una forma analítica.
Centralizado Versus Descentralizado
Annotations:
En el enfoque centralizado la planificación se realiza a partir de un grupo selecto de individuos con capacidad para formular la misión, visión, objetivos, planes, recursos. En otras palabras, un líder o un grupo formula el plan estratégico y éste es ejecutado por las capas inferiores. Para procurar el éxito en este enfoque se deben cumplir, mínimo, dos condiciones, en primer lugar, la organización debe estar en capacidad de comunicar a todos los niveles involucrados las acciones a ejecutar y poder convertir los planes en acciones efectivas.
Debe estar involucrada toda la organización, hablando en un mismo idioma.
Planificación Participativa
Annotations:
En el enfoque participativo, se procura que la organización, en todos sus niveles, participe y haga aportes a la definición de la misión, visión, objetivos y metas que permitan un compromiso para garantizar el cumplimiento del plan estratégico diseñado. El foco no se centra en darle autonomía a las gerencias o unidades de niveles inferiores. Aquí, cada uno de los integrantes de la organización tiene la oportunidad de expresar, individual o colectivamente, su punto de vista.
Todos aportan de forma participativa, en los quehaceres diarios en forma jerarquizada.