Estará indicado iniciar NP en aquellos enfermos críticos en los
que sea imposible utilizar el aparato digestivo, o cuando este
funcione, pero necesite estar en reposo, o no se puedan
alcanzar las necesidades nutricionales previstas por la vía oral
o con nutrición enteral (NE).
Tipos de Nutrición Parenteral
Nutrición parenteral periférica
Está indicada como técnica de soporte nutricional en
pacientes con poco estrés metabólico. Por un período
corto de tiempo y, como requisito básico, es necesario
que tengan una baja osmolaridad para poder ser
administrada por una vena periférica.
Nutrición parenteral total
Es la que más se utiliza en las unidades de
cuidados intensivos (UCI) de adultos en todas
las indicaciones que se han reseñado en el
epígrafe superior. La NPT se prepara en la
farmacia del hospital en una campana de flujo
laminar y con estrictas normas de asepsia para
evitar cualquier contaminación.
Los diversos nutrientes se mezclan en una bolsa única
que se protege de la luz para evitar que se desnaturalicen
las vitaminas que contiene.
Cura del punto de inserción del catéter
El cambio de apósito y cura del punto de inserción del
catéter se realizará siempre que sea necesario (el
apósito está sucio, despegado etc.…) pero de manera
general dos veces por semana, coincidiendo con el
cambio de bolsa de NTP con equipo incorporado.
Complicaciones relacionadas con la nutrición parenteral
Aunque son múltiples las complicaciones que
pueden relacionarse con la administración de NPT,
los estudios demuestran que tienen poca relevancia
clínica y que solo en raras ocasiones son causa de la
supresión de la NPT.
Relacionadas con la Inserción de catéteres venosos centrales Las
recomendaciones actuales aconsejan que sea la vena subclavia la elegida
para la colocación de un catéter central. El seguimiento de protocolos y el
aprendizaje tutelado evitan muchas de las complicaciones que a
continuación se describen por orden de frecuencia.
Diselectrolitemias: En general la NPT se administra con un aporte
balanceado de los principales electrolitos, en especial de los que
no se dan con la sueroterapia propia de los enfermos de UCI, así se
suministran las cantidades necesarias de fosfato monopotásico,
cloruro de calcio y sulfato de magnesio para evitar las
complicaciones derivadas de su falta o excesivo aporte.
Otras infecciones: Aunque es posible la contaminación de las bolsas de NPT
durante su preparación, los controles exhaustivos que se aplican hacen
altamente improbables estas complicaciones actualmente. No obstante, hay
que tener cuidado a la hora de administrar una bolsa de NPT revisando su
integridad, su fecha de caducidad y haberla mantenido en una nevera a 4ºC.
Nutrición Enteral
La NE a través de sondas que alcanzan el estómago o las partes
iniciales del intestino delgado, permite la nutrición rápida y eficaz
de estos enfermos que así mantienen el funcionalismo digestivo y
la barrera intestinal impermeable al paso de bacterias. La NE debe
iniciarse lo más rápidamente posible cuando el enfermo alcance
la estabilidad hemodinámica.
Indicaciones
Los enfermos tributarios de esta técnica son los que
presentan patologías que alteran los mecanismos de
deglución como enfermedades del sistema nervioso
central; ictus, trauma craneal, neuropatías tipo
Guillén-Barré, Miastenia Gravis, meningo-encefalitis
entre otras que cursan con afectación de pares
craneales bajos.
También estará indicada en enfermos sedados y los que
precisen ventilación mecánica y en enfermos que necesiten
aportes calóricos elevados como ocurre con los
politraumáticos, grandes quemados y sepsis graves.
Tipos de dietas enterales
Dietas normoproteicas con un contenido menor al 20%
de proteínas y de estas las hay normocalóricas o
hipercalóricas y unas tienen fibra y otras no aportan
fibra.
Las dietas hiperproteicas aportan de un 20 hasta
un 25% de su contenido energético en forma de
proteínas, distinguiéndose las que pueden ser
normocalóricas o hipercalóricas con y sin fibra.
La dieta estándar para un enfermo de UCI sería
una dieta hiperproteica, normocalórica y con
fibra.
Las dietas oligoméricas son dietas preparadas con
proteínas fraccionadas (oligopéptidos) y estarían
indicadas en enfermos con patología intestinal
como intestino corto, fístulas o pancreatitis.
Las dietas órgano-especificas están diseñadas para
el tratamiento de patologías concretas y, por tanto,
se ajustan a las necesidades del órgano que
disfunciona. Así, las dietas especiales para
insuficiencia hepática tienen un alto contenido en
aminoácidos ramificados y menor contenido en
aminoácidos aromáticos cuyo metabolismo
favorecería el empeoramiento de la encefalopatía.
Existen dietas que clasificamos como sistema-especificas
porque aportan fármaco-nutrientes como glutamina,
arginina, oligoelementos y antioxidantes cuyo objetivo sería
favorecer la regeneración tisular y la recuperación de la
homeostasis.
Complicaciones relacionadas con la nutrición enteral
Complicaciones mecánicas: Son las
relacionadas con las sondas y las
bombas de administración de la NE y
que se describen en el capitulo 5 de esta
sección.
Complicaciones gastrointestinales: Son las más
frecuentes y las que hay que evitar y controlar
siguiendo los protocolos de cada UCI.
Complicaciones infecciosas: La complicación más temible es la broncoaspiración de la
dieta y la posible neumonía secundaria que puede provocar SDRA y graves consecuencias
para el enfermo. La manera de evitar esta complicación es: mantener siempre la posición de
la cabecera de la cama entre 35 y 45º, comprobar antes del inicio de la NE la correcta
colocación de la sonda, realizar controles cada 6 horas del residuo gástrico y si está
aumentado disminuir o parar la administración de la dieta según esté protocolizado.
Referencia Bibliográfica: Fuentes Pumarola, C. Sirvent, J. y Bonet Saris, A.
(2013). Manual de enfermería intensiva. Girona, Documenta
Universitaria. Recuperado de
https://elibro.net/es/ereader/utnorte/115423?page=117.