Su parte escrita, que consiste
en fragmentos y en
anotaciones incompletas, es
un hervidero de intuiciones
geniales, pero contradictorias
Leonardo rechaza, con alteranía,
toda definición del alma por el solo
razonamiento.
Le repugna hablar del alma como de una
entidad que no tuviese necesidad de los
órganos de los sentidos para manifestarse.
Iniciador en el campo de la
psicología animal.
Le impresionan las antologías que descubre entre el cuerpo
humano y las estructuras del Cosmos.
Leonardo trato de explicar el papel desempeñado
por los nervios, mediante un fluido contenido en los
ventrículos del cerebro y transportado por nervios
huecos de calibre pequeñísimo. .
Paracelso
(1493-1541)
Se convierte en una suerte de "símbolo" de
una trasnformación radical en la manera de
entender la enfermedad y la esencia misma
de la vida.
La idea central de la
concepción de Paracelso es la
de las correspondencias ocultas
entre el universo
(macrocosmos) y el hombre
(microcosmos)
Mediante la observación de los astros, el
médico astrólogo descubre el remedio que
corresponde al órgano enfermo, y puede
volver a dar vigor al aura del paciente.
Fue un vagabundo, que vendía biblias de
pueblo en pueblo al mismo tiempo que sus
folletos y sus retratos; fue un empirista
burdo y supersticioso, un astrólogo de
plazuela, que extraía su exaltación del
alcoholismo y la locura
Pietro
Pomponazzi
Cree en la inmortalidad del alma
porque cree en la autoridad de la
iglesia, sus elucidaciones tienden a
establecer que no está, de ninguna
manera, fundada en razón.
Cree que los astros, permiten clasificar
tipológicamente a los humanos en
jupiterianos, mercurianos, etc. Los influyen
hasta el punto de inclinación naturalmente,
en virtud de una disposición caracterológica.
También cree que los milagros florecen
sobre todo en los países en que la razón es
mas débil, como es el caso de Egipto, Judea,
pues aparecen entonces, al igual que las
profecías como regla de justicia.
El acto de conocer, según el, no implica
mas que una íntima relación entre el alma
y el cuerpo, por una parte, y entre el
psiquismo y los objetos por otra parte.
Todo lo que
existe nace, crece
y muere.
Bernardino Telesio
Emprende la tarea de explicar
al hombre sin dejarle de
reconocer fines y facultades
trascendentes.
Llama estimativa y conmemorativa a esa alma
"producida por la simiente" en cuanto su función es
comparar y memorizar las sensaciones.
Recurre a argumentos
morales para mostrar que
el hombre posee un alma
incorpórea.
Considera feliz al hombre virtuoso, aunque sea
desdichado en la tierra, y a compadecer al
malvado aunque esté colmado de bienes aquí
abajo.
Giordano Bruno
(1550-1600)
Atribuye al universo mismo las
propiedades que están reservadas
a Dios: la infinitud y la coincidencia
de los contrarios.
Abrasado por una ardiente pasión por la verdad,
el misticismo se liga a un pensamiento crítico
singularmente audaz, con una conciencia aguda de
encarnar una nueva forma de cultura.
Juzga todo conforme al criterio de
su propia razón.
El alma es la causa inteligente que
rige la economía de los elementos
materiales del organismo.
Los prejuicios y los tabús se ejercen en
Bruno. En el de la vida sexual, considera que
la continencia es un hábito que varía según
la raza.
El espíritu eleva las almas a las cosas
sublimes, mientras que la imaginación las
hace descender a las inferiores.
Michel de
Montaigne
(1533-1592)
Desconfía de las concepciones demasiado simples y
superficiales, piensa que la intervención de la razón aleja
al hombre de estas leyes eventuales.
A sus ojos, lo esencial es vivir de una manera;
tomar en si conciencia de la vida en lo que ésta
tiene de más real. "Momento vivido".
El verdadero "yo" según
Montaigne, es el yo profundo
experimentando con el cuerpo
y el alma.