Los centros de trabajo actuales representan desafios de control importante para los gerentes,
desde el monitoreo del uso que dan los empleados a los equipos de computo en el trabajo,
hasta la proteccion del punto de trabajo de empleados molestos que intentan causar daños.
Desafío # 1. Ambientes de trabajo inflexibles
Los entornos de trabajo de hace 20 años ya no son lo suficientemente ágiles para que las
organizaciones tengan éxito en los próximos 20 años. Las operaciones manuales y repetitivas
limitan la escalabilidad y el crecimiento. Las aplicaciones monolíticas y no integradas
dificultan la efectividad y desmoralizan a los trabajadores. La gran cantidad de herramientas
y tipos de datos necesarios para completar un proceso de trabajo introduce fricción excesiva,
limita aún más la velocidad y la productividad, y aumenta la desconexión de los trabajadores.
Los desafíos relacionados con la seguridad y la conectividad limitan el acceso a los recursos
corporativos, lo que da lugar a actividades de trabajo que están limitadas por estructuras
físicas y momentos específicos del día.
Desafío 2. Limitaciones de talento
A medida que se acelera el ritmo del avance tecnológico, disminuye la "vida media" de los
conjuntos de habilidades relevantes y requeridos. De hecho, el 75% de los encuestados en la
Encuesta sobre el futuro del trabajo de IDC indicó que a su organización le resultaba difícil
reclutar habilidades digitales en al menos algunas áreas. Solo el 6% de las organizaciones creen
que son las mejores de su clase para atraer y retener el mejor talento y desarrollar habilidades
digitales.
La creciente necesidad de nuevas habilidades ha hecho que las organizaciones aprovechen programas
de capacitación online ad hoc dispares, limitando la capacidad de la organización para monitorizar el
progreso, ajustar las prioridades de capacitación y medir el impacto. Las organizaciones carecen de
los sistemas de aprendizaje modernos, inteligentes, ágiles y adaptativos necesarios para alinear y
evaluar el potencial de talento y volver a capacitar a los empleados. Además, la mentalidad tradicional
de “educación individualizada” evita que los propios trabajadores adopten nuevas estrategias de
aprendizaje de por vida.
Desafío # 3. Organizaciones rígidas y liderazgo jerárquico
Las estructuras organizativas tradicionales y estáticas que se centran en la función en
lugar de centrarse en los resultados inhiben el consenso, limitando la velocidad, la
agilidad y el valor comercial. La colaboración se ve gravemente obstaculizada, lo que a
su vez restringe la innovación. Las organizaciones son más reactivas que predictivas y
proactivas. La toma de decisiones jerárquicas y los mandatos de arriba hacia abajo no
se alinean con la necesidad de adaptabilidad y agilidad. Los equipos impotentes que
no tienen la autoridad para adaptar más retrasan el progreso. Los cuadros de mando y
KPI balanceados convencionales no miden con precisión las capacidades más críticas
para una organización transformada digitalmente, incluida la creatividad, la
colaboración y la innovación.
Desafío # 4. Seguridad, privacidad y confianza mal adaptadas
La tensión entre seguridad robusta y acceso a recursos es bastante obvia en el lugar de trabajo de
hoy. Los protocolos de seguridad engorrosos y repetitivos están perjudicando la productividad y las
experiencias de los empleados. Los usuarios finales desean la hiperpersonalización y la privacidad de
los datos, lo que puede ser difícil de conciliar para las organizaciones. La fuerza laboral
multigeneracional actual se está sumando a la dificultad, dadas sus diferentes preferencias y
umbrales de privacidad y seguridad. La necesidad de crear identidades individuales y temporales para
los trabajadores por contrato o trabajo presenta un riesgo de seguridad adicional y disminuye la
experiencia para aquellos trabajadores que deben gestionar múltiples identidades digitales.