Investigar es una lucha por saber, y
por demostrarlo
La investigación científica nunca es
especulativa. Es esencialmente
demostrativa.
Se encauza sobre la dialógica
racionalismo/empirismo
La investigación parte de la posibilidad. Debe ser posible investigar, de lo
contrario, caemos en las garras del ilusionismo sin fundamentos que no
aporta conocimiento por sí mismo, no sirve para nada si no tiene
dirección, si no le asiste el método.
Investigar es un proceso inacabado, nunca definitivo, en sus dos opciones
inicialmente posibles: No concluido y no concluyente.
No concluido: Porque jamás una investigación se
agota en sí misma. Puede hacerse de otra forma,
desde otros criterios, desde enfoques diferentes.
No concluyente: Porque ni cierra ni veta
ningún campo de trabajo, supone más bien
un cimiento que proporciona solidez a
investigaciones suplementarias y posteriores.
Cada vez que se elige tema de investigación lo inédito
viene a ser el enfoque y la fijación
Las mayores conquistas y objetivos de una
investigación son:
Aportar conocimiento inédito al
mundo científico
Ser validada al máximo nivel
académico.
La investigación debe valer y debe servir. Valer
para la ciencia y servir a la sociedad en donde
se produce y a la que se dirige.
Utilidad social
la validez científica nos proyecta sobre la idoneidad de la
investigación, mientras la utilidad social hace hincapié en
el marco de su oportunidad.
En una investigación no hay formularios estándares de validez universal
ni recetas de aplicación global. Por eso hay que determinar el método.
el movimiento de la investigación nunca es lineal
Existen parones , momentos de parálisis investigadora, de atasco, de
estancamiento. La lentitud no puede convertirse en parálisis definitiva.
Saltos, y situaciones que significan acelerones, avances e
impulsos. La la prisa no debe convertirse en descontrol.