“transformador”, “revolucionario”, “popular”,
“alternativo. nuevo adjetivo podemos alterar
el sentido histórico de la práctica profesional.
Es preciso caracterizar claramente de que
“crítica” se trata cuando hablamos del
Trabajo Social crítico, y que lugar tiene la
crítica en el ejercicio (teórico, político o
práctico) profesional
de qué “crítica” estamos hablando, lo que nos
coloca en la necesidad de diferenciar el
concepto de “crítica” de Marx de otros
significados del término “crítica”
Para Marx, el papel de la crítica es central, es un “arma”
en el proceso de conocimiento
Para Marx, la crítica no tiene cualquier relación con las
anteriormente descritas: se trata la crítica radical
La crítica (radical), consiste en el conocimiento que es aprehendido,
por el pensamiento, de la realidad, reproduciendo fielmente el
movimiento efectivo de la realidad
La crítica (radical) no tiene tampoco una orientación restauradora,
pues procura la transformación histórica orientada por el progreso y
por la emancipación humana
la crítica no puede ser romántica, ingenua, superficial o
puntual, pues, en la perspectiva de totalidad, debe
captar los fundamentos de los procesos, la esencia de
los fenómenos, llegando a la raíz de la realidad social. Se
trata de una crítica radical.
la crítica radical tiene como objetivo alcanzar la raíz de los
fenómenos, superar su visión aparente, manifiesta y
pseudoconcreta, y alcanzar su esencia y sus fundamentos,
entendiendo las causas y no solo las consecuencias
El conocimiento crítico (radical) tiene como objetivo no
solo describir un fenómeno, sino que busca alcanzar
una comprensión de sus causas.
No trata el fenómeno de forma aislada, de forma
autónoma, como autodeterminado, sino que
pretende apropiarse de sus múltiples
determinaciones, insertadas en una realidad que
lo contiene y lo determina.
la teoría crítica (radical), el conocimiento crítico, por
alcanzar la raíz de las cosas, su esencia, tiene fuerza
material, como un arma, como una herramienta, cuando
apropiada por las masas, para la transformación social
la crítica (radical), en cuanto herramienta de análisis y
horizonte de acción, no significa necesariamente una
práctica transformadora; esta depende de un sujeto
capaz de promover la transformación social
Una teoría revolucionaria no determina mecánicamente una
práctica revolucionaria; en esta relación hay innumerables
mediaciones que no pueden ser suprimidas:
agotamiento del modelo actual, correlación de fuerzas sociales,
grado de conciencia (de clase) de los sujetos, capacidad de
organización y movilización, etc.
la crítica tampoco significa el “rechazo” de la realidad o de las
perspectivas diferentes; por el contrario, la crítica no niega la
realidad existente (proponiendo idealmente otra situación
“alternativa”, el “deber ser”). Al contrario, el conocimiento
crítico radical parte de la realidad concreta y confronta el
conocimiento teórico con la propia realidad
la crítica tampoco significa el “rechazo” de la realidad o de las
perspectivas diferentes; por el contrario, la crítica no niega la
realidad existente (proponiendo idealmente otra situación
“alternativa”, el “deber ser”). Al contrario, el conocimiento crítico
radical parte de la realidad concreta y confronta el conocimiento
teórico con la propia realidad
la crítica radical marxista al capitalismo y su proyecto
revolucionario no significa la fundación idealizada de una
“comunidad alternativa”, una idealización del “deber ser”, ajena e
independiente al sistema capitalista (y co-existente al mismo), sino
que remite a la lucha
la crítica no es solo un estado de espíritu (o
mental), un sentimiento (crítico), un espíritu de
rebeldía, una pasión.
La crítica se basa en la razón, en el pensamiento racional, en la
capacidad reflexiva del conocimiento científico crítico, sin el
cual será meramente romántico, ingenuo, moralista
Sin embargo, no es suficiente la razón; apenas esta solo conduce a
un conocimiento “neutral”, “descomprometido”, a una actitud
“contemplativa” del sujeto
El conocimiento crítico debe alimentarse de la indignación, la pasión, que
conducen al compromiso, al envolvimiento del sujeto, a la necesidad de
transformar la realidad, al conocer para transformar.
el punto de partida de la crítica (su objeto) es la realidad;
su motor es la indignación (con las formas de
desigualdad, dominación, explotación, subordinación) y
la teoría es la herramienta (que permite pasar de la
indignación al conocimiento veraz de los fundamentos y
la esencia de los fenómenos).
Razón y pasión, cerebro y corazón, pensamiento y
sentimiento, son la combinación necesaria para el
conocimiento crítico y el envolvimiento crítico