El primer procónsul de Egipto fue Cayo Cornelio Galo, quien conquistó el Alto Egipto con la fuerza de
las armas, y estableció un protectorado bajo control romano sobre la zona meridional de la frontera,
que había sido abandonada por los últimos ptolomeos. El segundo prefecto, Elio Galo, realizó una
expedición, fracasada, para conquistar Arabia Petraea e incluso Arabia Felix; sin embargo, la costa del
mar Rojo de Egipto no cayó bajo control romano hasta el reinado de Claudio. El tercer prefecto, Publio
Petronio, despejó los descuidados canales de irrigación, estimulando un resurgimiento de la
agricultura.
Período tardío (siglos IV-VI)
El siglo IV estuvo marcado por dos acontecimientos importantes la fundación de Constantinopla en
330 y su designación como nueva capital del Imperio Romano y, la división del imperio en dos, con
Egipto formando parte del Imperio romano de oriente. El uso del latín, que nunca se consolidó en
Egipto, disminuyó rápidamente y el griego continuó siendo el idioma dominante en el gobierno y
entre los académicos. Durante los siglos V y VI, el Imperio Romano de Oriente, se convirtió
gradualmente en un estado completamente cristiano cuya cultura difería significativamente de su
pasado pagano. La caída del Imperio Romano de Occidente en el siglo V aisló aún más a los romanos
egipcios de la cultura de Roma y aceleró la proliferación del cristianismo. El triunfo de la nueva
religión condujo al abandono completo de las tradiciones faraónicas: con la desaparición de los
sacerdotes y sacerdotisas egipcias que servían en los templos, ya nadie podía leer los jeroglíficos del
antiguo Egipto y sus templo
Cristianismo en Egipto
Los cristianos egipcios creían que el Patriarcado de Alejandría fue fundado por San Marcos en torno al
año 33, pero apenas se conoce cómo surgió el cristianismo en Egipto. El historiador Helmut Koester ha
propuesto, basado en algunas fuentes, que originalmente los cristianos en Egipto estaban
predominantemente influenciados por el gnosticismo, que solo habría cambiado con los esfuerzos de
Demetrio de Alejandría, cuando, gradualmente, las creencias mayoritarias en la región comenzaron a
alinearse con las del resto de la cristiandad. La vergüenza causada por estos orígenes puede explicar
la falta de detalles sobre el período, hay muchas lagunas en esta teoría para suponer que nuestra
ignorancia en esta situación es solo un caso especial.
La antigua religión egipcia sorprendentemente no resistió mucho al avance del cristianismo.
Posiblemente, la colaboración activa de los líderes religiosos con los conquistadores griegos y
romanos ya había erosionado su autoridad en ese momento. Otra explicación es que la religión
nativa había comenzado a perder su atractivo entre las clases bajas a medida que los impuestos y los
servicios litúrgicos instituidos por los romanos redujeron aún más la calidad de vida. Alejandría se
convirtió en uno de los grandes centros cristianos hacia finales del siglo II. Los apologistas cristianos
Clemente de Alejandría y Orígenes vivieron gran parte de su vida en esa ciudad, donde escribieron y
enseñaron.
Invasión Persa (619)
En 608 el shāhān shāh persa Cosroes aprovechando la grave
crisis interna del Imperio de Oriente tras el derrocamiento del
emperador Mauricio por Focas atacó sus débilmente
defendidas provincias orientales. Para el 615 los Sasánidas se
habían hecho con el control de Mesopotamia Septentrional,
Siria y Palestina, tras estas rápidas conquistas el Sha, cuyo
objetivo era expulsar a los romanos de Asia para siempre, puso
sus ojos en Egipto el granero del imperio. La invasión comenzó
en 618 y para 619 la capital, Alejandría, era conquistada y luego
era sometida todo el resto de la provincia. La administración
sasánida del territorio duró once años y dependió del general
Shahrbaraz, que se instaló en Alejandría. Una contraofensiva
romana lanzada por el emperador Heraclio en la primavera de
622 cambió el destino de la guerra, que terminó con la caída de
Cosroes el 25 de febrero de 628.2 El hijo y sucesor de Cosroes,
Kavad II, que reinó hasta septiembre del mismo año, firmó un
tratado de paz y
Conquista árabe (639-646)
En diciembre del 639, Amr ibn al-As partió hacia Egipto con un ejército de entre tres mil quinientos y
cuatro mil soldados. Entró a Egipto desde Palestina (recientemente conquistada junto con Siria) y
avanzó rápidamente a través del delta del Nilo. Las guarniciones imperiales se retiraron a ciudades
amuralladas, donde resistieron durante más de un año. Sin embargo, el califa envió refuerzos, y en
abril de 641, los ejércitos árabes capturaron Alejandría. Los romanos enviaron una gran flota para
recuperar Egipto y lograron reconquistar Alejandría en 645, sin embargo, los musulmanes retomaron
la ciudad al año siguiente, terminando definitivamente los 975 años del dominio grecorromano sobre
Egipto.