La naturaleza es todo aquello que se ha formado de manera
espontánea en el planeta Tierra. Forman parte de ella todos los
organismos vivos que habitan el planeta (microorganismos,
hongos, animales y plantas), todas las sustancias materiales y
minerales (agua, tierra, hierro, etc.) y todos los procesos
propios del planeta (fenómenos meteorológicos, movimiento
de placas tectónicas,
Ecosistemas
El ecosistema es un sistema dinámico relativamente
autónomo, formado por una comunidad natural y su
ambiente físico. El concepto, que empezó a desarrollarse
entre 1920 y 1930, tiene en cuenta las complejas
interacciones entre los organismos (plantas, animales,
bacterias, algas, protozoos y hongos, entre otros) que forman
la comunidad y los flujos de energía y materiales que la
atraviesan.
Todas las formas de vida tienen la necesidad de
relacionarse con el entorno en que viven, y también con
otras formas de vida. En el siglo XX, esta premisa dio lugar
al concepto de ecosistema, que se pueden definir como
cualquier situación en la que hay una interacción entre
organismos y su entorno. Los ecosistemas constan de
factores bióticos y abióticos que funcionan
Dentro de los diversos usos actuales de esta palabra, «naturaleza»
puede hacer referencia al dominio general de diversos tipos de seres
vivos, como plantas y animales, y en algunos casos a los procesos
asociados con objetos inanimados —la forma en que existen los
diversos tipos particulares de cosas y sus espontáneos cambios—,
así como el tiempo atmosférico, la geología de la Tierra y la materia
y energía que poseen todos estos entes. A menudo, se considera
que significa «entorno natural»: animales salvajes, rocas, bosques,
playas, y en general todas las cosas que no han sido alteradas
sustancialmente por el ser humano, o que persisten a pesar de la
intervención humana. Este concepto más tradicional de las cosas
naturales implica una distinción entre lo natural y lo artificial
La belleza en la naturaleza
La belleza de la naturaleza es un tema recurrente en la vida moderna
y en el arte: los libros que la ensalzan llenan grandes estanterías de
bibliotecas y librerías. Esa cara de la naturaleza, que el arte
(fotografía, pintura, poesía...) tanto ha retratado y elogiado revela la
fuerza con la que muchas personas asocian naturaleza con belleza. El
porqué de la existencia de esa asociación y en qué consiste ésta
constituyen el campo de estudio de la rama de la filosofía llamada
estética. Más allá de ciertas características básicas de la naturaleza en
cuya hermosura coinciden la mayoría de filósofos, las opiniones son
prácticamente infinitas.
La naturaleza más allá de la Tierra
El espacio exterior, también llamado espacio a secas, designa las
regiones relativamente vacías del universo fuera de las atmósferas de
los cuerpos celestiales. Se añade el adjetivo exterior para distinguirlo
del espacio aéreo. No existe ningún límite definido entre la atmósfera
terrestre y el espacio, puesto que ésta se va atenuando
gradualmente a medida que aumenta la altitud. El espacio cósmico
ubicado dentro de los límites del Sistema Solar se conoce como
espacio interplanetario, cuyo límite con el espacio interestelar es lo
que conocemos como heliopausa. Aunque el espacio exterior es de
por sí muy amplio, no está vacío. En él existen, aunque repartidas de
manera muy dispersa, varias docenas de moléculas orgánicas
descubiertas hasta la fecha gracias a la espectroscopia rotacional, la
radiación de fondo de microondas y la radiación cósmica,