La electrólisis es el proceso que separa los
elementos de un compuesto por medio de la
electricidad. En ella ocurre la captura de
electrones por los cationes en el cátodo (una
reducción) y la liberación de electrones por los
aniones en el ánodo (una oxidación).
Fue descubierta accidentalmente en 1800 por William
Nicholson mientras estudiaba el funcionamiento de las
baterías. Entre los años 1833 y 1836 el físico y químico
inglés Michael Faraday desarrolló las leyes de la
electrólisis que llevan su nombre y acuñó los términos.
Se aplica una corriente eléctrica continua mediante un par de electrodos
conectados a una fuente de alimentación eléctrica y sumergidos en la
disolución. El electrodo conectado al polo positivo se conoce como ánodo, y
el conectado al negativo como cátodo. Cada electrodo atrae a los iones de
carga opuesta. Así, los iones negativos, o aniones, son atraídos y se
desplazan hacia el ánodo (electrodo positivo), mientras que los iones
positivos, o cationes, son atraídos y se desplazan hacia el cátodo (electrodo
negativo). La manera más fácil de recordar toda esta terminología es
fijándose en la raíz griega de las palabras. Odos significa camino. Electrodo es
el camino por el que van los electrones. Catha significa hacia abajo
(catacumba, catástrofe). Cátodo es el camino por donde caen los electrones.
Anas significa hacia arriba. Ánodo es el camino por el que ascienden los
electrones. Ion significa caminante. Anión se dirige al ánodo y catión se dirige
al cátodo. La nomenclatura se utiliza tam
Electrólisis del agua[editar] Diagrama simplificado del
proceso de electrólisis. Si el agua no es destilada, la
electrólisis no sólo separa el oxígeno y el hidrógeno, sino los
demás componentes que estén presentes como sales,
metales y algunos otros minerales (lo que hace que el agua
conduzca la electricidad no es el H2O, sino que son los
minerales. Si el agua estuviera destilada y fuera 100 % pura,
no tendría conductividad). Es importante hacer varias
consideraciones: Nunca deben unirse los electrodos, ya que la
corriente eléctrica no va a conseguir el proceso y la batería se
sobrecalentará y quemará. Debe utilizarse siempre corriente
continua (energía de baterías o de adaptadores de corriente),
nunca corriente alterna (energía del enchufe de la red). La
electrólisis debe hacerse de tal manera que los dos gases
desprendidos no entren en contacto, de lo contrario
producirían una mezcla peligrosamente explosiva (ya que el
oxígeno y el hidrógeno resultantes se encuentran en
proporción
Aplicaciones de la electrólisis[editar] Hierro puro (99,97 %+), en
pedacitos, refinado electroliticamente. Producción de aluminio, litio,
sodio, potasio, y magnesio. Producción de hidróxido de sodio, ácido
clorhídrico, clorato de sodio y clorato de potasio. Producción de
hidrógeno con múltiples usos en la industria: como combustible, en
soldaduras, etc. Ver más en hidrógeno diatómico. La electrólisis de
una solución salina permite producir hipoclorito (cloro): este método
se emplea para conseguir una cloración ecológica del agua de las
piscinas. La electrometalurgia es un proceso para separar el metal
puro de compuestos usando la electrólisis. Por ejemplo, el hidróxido
de sodio es separado en sodio puro, oxígeno puro e hidrógeno puro.
La anodización es usada para proteger los metales de la corrosión. La
galvanoplastia, también usada para evitar la corrosión de metales,
crea una película delgada de un metal menos corrosible sobre otro
metal.