El agresor se siente en situación de superioridad sobre la víctima y busca dominar la relación bajo
sus criterios, anulando a la otra persona, puede ser un espejo de su antepasado.
CONSECUENCIAS
CON LOS HIJOS
Vivenciar la angustia de la madre maltratada, su temor, inseguridad, tristeza, les produce una
elevada inseguridad y confusión, esa angustia se traduce en numerosos trastornos físicos, terrores
nocturnos, enuresis, alteraciones del sueño, cansancio, problemas alimentarios, ansiedad, estrés,
depresión.
EMOCIONAL
Los individuos significativos de quienes depende el sujeto lo descalifican, humillan, discriminan,
someten su voluntad o lo subordinan en distintos aspectos de su existencia que inciden en su
dignidad, autoestima e integridad psíquica y moral.
SOLUCIONES
Mantener una autoridad permisiva parental, evitar la violencia de género entre los padres, procurar no
castigar, sino gratificar, negociar mediante el diálogo los desacuerdos y las crisis, fomentar vínculos de
respeto e igualdad entre todos los componentes de la familia.