Transformar el sistema educativo es uno de los retos más temibles que
el siglo veintiuno está por revelar
La escuela moderna debe lo esencial de sus estructuras y de su
organización al siglo diecinueve.
La enseñanza gratuita y obligatoria daba a cada
familia de escasos recursos la esperanza de ver a
uno de los suyos elevarse en la jerarquía social.
Vaciada en el molde de la sociedad industrial,
concebida para responder a sus necesidades
técnicas y para asegurar la reproducción de sus
relaciones sociales, la escuela transmitía sus
normas y sus valores.
Se descubre con espanto que del 20% al 25% de la población adulta, aunque debidamente escolarizada en
su tiempo, ha olvidado casi por completo lo que había más o menos aprendido con laboriosidad en la
escuela y no sabe prácticamente leer ni escribir.
LA SOCIEDAD FABRICA EXCLUIDOS
Toda una franja de la sociedad se encuentra
excluida de la educación, lo que tiene por
consecuencia la exclusión de la mayor parte de
los empleos.
En el tercer mundo, el problema se mantiene y agrava por una
demografía galopante, que los estados más pobres no siempre llegan
a dominar.
En ciertos países del tercer mundo y, a menor escala, en
algunos países industrializados, el letrado se apodera de
las riquezas comunes.
UN PROGRAMA EDUCATIVO MUNDIAL
Durante la primera mitad del siglo
veintiuno, la tensión aumenta, la miseria
de los excluidos se acrecienta, pero los
que más resisten de entre ellos se
vuelven combativos y aguerridos
Este periodo normativo impone a una generación
entera el sistema cultural de las necesidades de la
época.
Durante la segunda mitad del siglo veintiuno, los individuos, más
dueños de sí mismos, reaccionan con mayor fuerza contra las
normas que les han sido impuestas.
EL DESAFÍO TECNOLÓGICO
Hacia finales del siglo veinte, las
mutaciones tecnológicas se encuentran
todavía aceleradas debido al gusto cada
vez más marcado por la autonomía
individual.
La investigación y la creatividad se vuelven
los triunfos principales de las empresas en
la lucha de la competencia:
Una cultura técnica y ecológica se difunde y
permite la realización de los grandes trabajos
planetarios, el dominio de la relación con la
biosfera.
APRENDER LOS MÉTODOS, NO LOS DATOS
Es necesario mantenerse informado
constantemente sobre las últimas brechas
científicas, estar al acecho de las innovaciones
que surgen en el mundo entero, ser el
primero en ponerlas en práctica.
Es necesario ser capaz de adaptarse, de
modificar sus orientaciones, de revisar sus
puntos de vista, pero también mantener
una posición firme frente a una tentativa
de la desinformación.
LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN ENTRAN AL BAILE
Otro aspecto de esta revolución de la
educación es la explosión del uso de los
medios de comunicación.