El crecimiento de las plantas dependen de la
disponibilidad del agua y de los nutrientes,
y de la protección que tengan
contra el ataque de los parásitos
Las causas más comunes del crecimiento deficiente de las
plantas y de la destrucción de cosechas son los fitopatógenos,
el clima desfavorable, las malezas y las plagas de insectos
Los fitopatólogos estudian las enfermedades causadas por hongos, bacterias, micoplasmas, plantas
superiores parásitos, virus, viroides nematodos y protozoarios, las alteraciones que se
producen en las plantas por exceso, desequilibrio o carencia de ciertos factores físicos o químicos, como
la temperatura, la humedad y los nutrientes
La fitopatología utiliza las técnicas básicas y los conocimientos de la botánica, micología, bacteriología,
virología, Hematología, anatomía vegetal, fisiología vegetal, genética, bioquímica, horticultura,
edafología, silvicultura, química, física, meteorología y muchas otras ramas de la ciencia.
Aunque la fitopatología como ciencia trata de aumentar el conocimiento acerca de las causas y del
desarrollo de las enfermedades de las planta, tiene un objetivo más práctico
desarrollar métodos de control para todas las enfermedades de las plantas.
Las plantas se mantienen sanas o normales cuando llevan a cabo sus
funciones fisiológicas hasta donde les permite su potencial genético, las
cuales son división celular, diferenciación y desarrollo, absorción del
agua y minerales del suelo, translocación, fotosíntesis, metabolismo de
los compuestos sintetizados, la reproducción y, finalmente, el
almacenamiento de las reservas alimenticias necesarias a la
reproducción o a la invernación.
Las plantas presentarán enfermedad cuando una o varias de sus
funciones sean alteradas por los organismos patógenos o por
determinadas condiciones del medio
Por lo tanto, la enfermedad en las plantas se define como el mal funcionamiento de las células y tejidos
del hospedante debido al efecto continuo sobre estos últimos de un organismo patógeno o factor
ambiental y que origina la aparición de los síntomas
El criterio más útil en la clasificación de una enfermedad es el tipo de agente patógeno que la
ocasiona, tiene la ventaja de que indica la causa de la enfermedad, lo cual permite prever su
probable desarrollo y diseminación, así como las posibles medidas de control.
Enfermedades infecciosas o bióticas por:
Hongos, procariotes (bacterias y micoplasmas),
plantas superiores parásitas, virus y viroides,
nematodos y Protozoos
Enfermedades no infecciosas o abióticas por: Temperatura, Humedad, Luz, Oxigeno,
Contaminación atmosférica, Deficiencia de nutrientes, Toxicidad mineral, PH, Toxicidad
en las plantas y Practicas agricolas inadecuadas
Historia
El hombre también ha padecido con las enfermedades de las plantas
desde épocas remotas. Esto se constata en el Antiguo Testamento, en el
cual los mildius y tizones se mencionan junto con la guerra y las
enfermedades humanas, corno las grandes calamidades de los pueblos.
Teofrasto un filosofo griego 270 años antes de
cristo fue el primero que estudió y observo las
enfermedade
Los romanos se percataron tan dolorosamente de los efectos
devastadores de las royas en los cultivos productores de granos
que crearon un dios especial, Robigo, para protegerlos de estas
enfermedades.
El descubrimiento del microscopio compuesto a mediados del siglo
XVII dio paso a una nueva era en las ciencias de la vida. Se estudió y
describió la anatomía de las plantas y se descubrieron los hongos,
bacterias y muchos otros microorganismos.
El descubrimiento y la función de los hongos inicio en 1729 con Michelli, quien observó que las
partículas de polvo tomadas a partir de un hongo eran las semillas (esporas) del hongo y que eran
transportadas en el aire, posteriormente otros hicieron grandes aportes como Debary en 1853, quien
trabajo con hongos de la roya y el tizón, determinando que eran la causa y no el resultado de la
enfermedad, Otras de sus grandes contribuciones fueron sus estudios de los hongos de la familia
Peronosporaceae y las enfermedades que ocasionan (mildius vellosos)
El control de la enfermedades en las plantas, inicio en 1882 por Milladert, quien observó que los viñedos
rociados con cal y sulfato de cobre para evitar rapiña mantenían sus hojas durante toda la estación,
mientras que las no tratadas eran destruidas por la enfermedad mildiu velloso de la vid y caían sobre el
terreno. A esa mezcla más tarde se le denominó "caldo bórdeles" y se comprobó que tenía un éxito
sumamente notable en el control de los mildius vellosos y muchas otras enfermedades del follaje de las
plantas. De igual manera en 1934 Tisdale descubrió el primer fungicida de ditiocarbamatos (tuíram), el
cual llevó al desarrollo, en los diez años siguientes, de una serie de fungicida eficaces y ampliamente
utilizados, como el ferbam, zineb y maneb;
Sin embargo, no fue sino hasta la década de los setentas cuando el uso de los fungicidas sistémicos
se generalizó y en 1972, New y Kerr introdujeron el primer método de control biológico (con fines
comerciales) de una enfermedad bacteriana de las plantas (la agalla de la corona) mediante el uso de
otra bacteria.
Las Bacterias tuvieron su primer acercamiento en 1878 por Burril, demostrando que una de ellas era la causa del
tizón de fuego del peral y del manzano, las numerosas y excelentes aportaciones de E. F. Smith desde 1895, sobre
el estudio de las enfermedades bacterianas de las plantas, en particular los marchitamientos bacterianos de las
cucurbitáceas, solanáceas y cruciferas, despejaron cualquier duda acerca de la importancia de esos microorganismos
como fitopatógenos. Sin embargo, como fue el caso de los hongos fitopatógenos, fue lenta la aceptación de las
bacterias como causas de enfermedades en las plantas.
Los primeros nematodos filoparásitos fueron reportados por Needham en 1743 al encontrarlos en el interior de
las agallas del trigo (granos). Sin embargo, no fue sino hacia el año de 1850 cuando se observaron otros
nematodos entre ellos los del bulbo y del tallo, los noduladores y formadores de quistes en las raíces. La serie
de estudios que efectuó Cobb de l913 a 1932 sobre los fitoparásilos, contribuyó ampliamente en los aspectos
de metodología, morfología y taxonomía de los nematodos
En 1886, Mayer reprodujo la enfermedad del "mosaico del tabaco", al inyectar el jugo de las plantas de
tabaco infectadas en otras sanas, este jugo continuo infectando las demás a pesar de ser sometidas a
temperaturas de 60 grados centigrados, aunque perdió su efecto luego de calentarse varias horas a 80
grados centigrados; en 1892, Ivanowski demostró, que el agente que producía el mosaico del tabaco podía
pasar incluso a través de un filtro que retenía a las bacterias y pensó que la enfermedad era ocasionada
por una toxina secretada por las bacterias, Finalmente, Beijerinck en 1898 llegó a la conclusión de que el
mosaico del tabaco era ocasionado no por un microorganismo, sino por un contagiurn vivum fluidum, el que
denominó virus.
En 1909, Lafont observó protozoarios flagelados en las células productoras de látex de las plantas lactíferas de la
familia de las Euforbiáceas. En 1963, Vermeulen presentó pruebas de la
patogenicidad de los flagelados sobre los cafetales, y en 1976 se reportaron asociados a
varias enfermedades de los cocoteros y palmeras africanas en Sudamérica y en África.
En 1967, en Japón, Doi y sus colaboradores observaron cuerpos semejantes a los micoplasmas en el floema de
las plantas infectadas por varias enfermedades transmitidas por chicharritas. Desde entonces se ha demostrado
que los espiroplasmas son la causa del achaparramiento del maíz y de la enfermedad persistente de los cítricos
Durante el presente siglo, la fitopatología ha madurado como ciencia. Se han descrito miles de
enfermedades, se han identificado varios microorganismos patógenos, se han descubierto nuevos tipos de
ellos y se han desarrollado medidas de control
Aspectos Relevantes
Las enfermedades de las plantas son importantes para el hombre debido a que perjudican a las plantas y
sus productos. Para los millones de personas que habitan la Tierra y cuya existencia depende de los
productos vegetales, las enfermedades de las plantas pueden marcar la diferencia entre una vida normal y
una acosada por el hambre, o incluso conducir a la muerte por inanición.
El tipo y monto de las pérdidas ocasionadas por las enfermedades de las plantas varia de acuerdo a la
especie de planta o los productos que se obtienen de ella, así como al agente patógeno, la localidad, el
medio ambiente, las medidas de control practicadas, etc., o con base en la combinación de todos estos
factores. El monto de las pérdidas varía desde porcentajes mínimos hasta pérdidas de un 100%.
El mejoramiento de las plantas de cosecha mediante la producción de variedades de alto rendimiento ha
sido y sigue siendo una de las formas más adecuadas y económicas de incrementar la producción de los
cultivos.
Los herbicidas que con mayor frecuencia se utilizan en los campos cultivados dañan directamente a
las plantas cultivadas, sino también influyen sobre varios patógenos suelo y microorganismos antagónicos a
esos patógenos
Las enfermedades más importantes son,
Royas, Carbones, Tizón tardío, Cenicilla de los viñedos, Sigatoka, Mancha foliar del caucho, Mosaico de la
caña, Tristeza de los cítricos, Marchitez moteada del tomate, Cáncer de los cítricos, Nematodo del Anillo rojo de la palma y
el coco, Nematodos o agallas de la raíz.
Diagnóstico Vegetal
Enfermedades Infecciosas
Enfermedades ocasionadas por Plantas
superiores o parasitas, comprobar que esta
creciendo sobre una planta
Enfermedades ocasionadas por nematodos,
verificar la presencia del patógeno en la planta o
en el suelo, los cuales se distingen por el estilete
Enfermedades ocasionadas por Hongos, se logra
mediante el estudio microscópico de la morfología
de su micelio, de sus estructuras fructíferas y de
sus esporas
Enfermedades ocasionadas por bacterias, se diagnostica por los síntomas de la
enfermedad y la presencia de bacterias en la zona afectada; la forma mas fácil es aislarla y
hacerla crecer en un cultivo puro y con una sola colonia reinocular una planta hospedante
susceptible, para reproducir los síntomas de la enfermedad, y compartirlos posteriormente
con los producidos por especies bacterianas conocidas
Enfermedades ocasionadas por micoplasmas, el diagnóstico se basa en los síntomas, como achaparramiento
en las plantas, amarillamiento o enrojecimiento de las hojas, proliferación de vastagos (retonos) y raíces, flores
anormales y decaimiento final y muerte de la planta
Enfermedades ocasionadas por Virus y Viroides, causan síntomas
característicos en sus hospedantes, y estos permiten identificarlos
rápidamente, sino es posible se realizan pruebas de laboratorio
Enfermedades ocasionadas por más de un patógeno,
comprobar la presencia de los mismos y diagnosticarlos
Enfermedades no infecciosas
En ocasiones, resulta fácil hacer el diagnóstico de un factor específico del ambiente que ocasiona o ha
ocasionado una enfermedad, mediante un cambio evidente en el ambiente, la mayoría de ellos ocasionan
síntomas no específicos que dificultan el diagnóstico preciso de la causa de la enfermedad, a no ser que se
tenga conocimiento de las condiciones ambientales previas, los tratamientos aplicados con anterioridad, y
otros datos de factores que hayan influido en el área.
En caso de que sea probable que el patógeno
represente la causa de la enfermedad, pero que no
existan registros anteriores que apoyen esa suposición,
se aplican los postualdos de Koch l