ejemplo

La alfabetización en nuestros tiempos, no se trata solo de que la o las personas estén preparadas con los contenidos básicos de la educación, sino que, desarrollen ciertas habilidades tecnológicas que les ayuden a repararse a actualizar sus actividades diarias con éstas, llevando a cabo procesos con ellos. Las destrezas y competencias que se desarrollan pueden ser desde el uso de un celular hasta el manejo completo de una computadora, con la ayuda de las experiencias y los guías (profesores en este caso) que ayuden al alumnado a desarrollar las habilidades para el desarrollo de esta alfabetización. La era digital ha desarrollado en los estudiantes y en las personas en general, competencias que les permiten ser gente “letrada” que a partir del buen manejo de estas tecnologías cambien su forma de actuar y de pensar, a lo que podemos llamar la alfabetización informática, en donde la información es captada, se sabe manejar y se pueden reconocer los errores que ésta pueda tener. Como nos habla la lectura sobre este tipo de alfabetización, “debemos puntualizar que dicha información no se circunscribe a un único formato letrado y tradicional, sino que se abre dicha afirmación a un “información” que puede expresarse a través de multitud de formatos y soportes” (Garrido Argandoña, 2009) Por lo tanto, como lo dice el párrafo anterior, existe una serie de información, donde podemos encontrar contenidos que nos letreen en el ámbito educativo y nos amplíen nuestro campo intelectual y social. Al desarrollar una alfabetización nueva, se piensa que entonces una persona analfabeta puede ser aquella que no sabe manejar un aparato electrónico, o que mucho menos conoce de su existencia, pero no sólo cambia el tradicionalismo de no conocer el objeto como tal, sino el no manejar y conducirse a un buen conocimiento a partir de todos los contenidos que nos presenta la tecnología.