La primera infancia en una casa de pueblo, con pocos vecinos y con una sola colección de libros y muchas revistas de historietas que las podíamos leer durante el día y hasta que se oscurecía ya que no teníamos luz electrica
Leía revistas Para Ti, de novelas (Corin Tellado ) y revistas de historietas que mis hermanos mayores compraban (Nipur, Intervalo, Condorito y otras)
Los cuentos y las anécdotas que nos contaba mi padre después de la cena, como no teníamos luz eléctrica ni televisión él nos entretenía contándonos sus aventuras hasta que nos daba sueño y nos ivamos a dormir
Me cambio de casa y voy a vivir en una barrio donde teníamos muchos vecinos, con quienes intercambiabamos revistas y libros para la escuela
Revistas infantiles de Pato Donald, Patoruzú, BilliKen y Anteojitos
tuve la suerte de tener de vecinas a una maestra y a una profesora de lengua que nos prestaban los libros para le escuela primaria y secundaria ya que mis padres no podían comprarlos
me hice muy amiga de la hija de mi vecina que era maestra y siempre hacíamos la tarea escolar juntas y su comedor se convertía en una aula con todos los elementos que necesitábamos para hacer al tarea
las buena relaciones humanas que tuve con muchas personas que les gustaba leer, como por ej. mi maestra de 7º Grado
Mi padre, que era trabajador ferroviario, que solo tenía 4º grado, sin embargo leía diarios, Revistas Selecciones, El Martin Fierro, La Biblia y escuchaba muchos noticieros
Su pasión por la lectura siempre me asombró
Ya en mi formación universitaria los Libros de Historia Argentina de José Luis Romero y los de Eric Hobsbawam que nos plantean una historia social, de proceso.
Otros libros muy significativos fueron las Obras de Juan Carlos Dávalos que me ayudaron a comprender y valorar las costumbres y tradiciones de Salta y la región
En la actualidad estoy fascinada por la libreria digital que tenemos en Internet