En nuestra época, el compromiso con los valores de igualdad, libertad, solidaridad y
respeto al medio ambiente implica abordar seriamente el fenómeno del consumo, analizarlo en
todas sus vertientes −individual y social, local y global, económica y ecológica− y adoptar
criterios bien razonados en el comportamiento cotidiano para avanzar hacia una futuro
la participación en las decisiones sobre el consumo, exige
poner en marcha con mayor énfasis la deliberación pública sobre los estilos de vida que se están
asumiendo, y sus respectivas ventajas e inconvenientes. Los consumidores pueden y deben tomar
mayor protagonismo a través de asociaciones, instituciones y organizaciones que estén
dispuestas, no sólo a exigir derechos, sino a asumir responsabilidades por las formas de
consumo; por sus repercusiones en el bienser de todos los seres humanos. Los consumidores
gozan de una autonomía condicionada, y por ello pueden, dentro de ciertos límites, asumir con
sus iguales las responsabilidades sobre qué se consume, para qué y quién consume
Autónomo
Poder apropiarse
NO expropiándose
Poder elegir
No compatible con bienes que
producen adicción
justo
consume sin poner en
peligro la naturaleza
promover respeto y libertad a tus semejantes
y a ti mismo siempre al mismo tiempo
corresponsable
asumir
promover
dialogar
respeto del medio ambiente
consumo justo y responsable
felicitante
Lucidez
conciencia
Cordura
prudencia
Justicia
PRINCIPIOS ÉTICOS
Nota:
sin ella estaríamos completamente
determinados por la naturaleza y sus leyes físicas, y no tendría sentido pedir responsabilidad a
nadie por sus actos, ni otorgar mérito alguno por los comportamientos generosos, ni tratar de
educar a nadie para conducir su propia vida conforme a principios éticos.
libertad
Nota:
Si la libertad es la esencia humana, el consumo de los productos de mercado es entonces
una de las manifestaciones de la libertad
consiente
responsable
No
compulsiva
Nota:
sólo si consumimos de forma humana, y no de forma
compulsiva, estaremos manifestando realmente nuestra identidad como personas
Manipulada
Nota:
Parece que la
mayoría de la población vive manipulada por los poderes de la publicidad, de los medios de
comunicación y de las creencias sociales que llevan aparejados ciertos patrones de consumo
Publicidad
medios de comunicación
creencias sociales
sociedad
Nota:
En estas sociedades se forja un “carácter consumista” que se manifiesta en una
serie de hábitos y creencias que no necesitan justificación alguna, porque ya forman parte de las
convicciones sociales asumidas en la práctica cotidiana.
Los ciudadanos esperan lo mismo de la política y de la economía: que se amplíen cada
vez más sus posibilidades de consumo. La razón de tal expectativa es que la elevación del nivel
de consumo ha llegado a ser el signo visible del éxito social, hasta el punto de que las personas
contemplan su propia autoestima y la estima del prójimo en conexión con dicho nivel de
consumo.
caracter consumista
habitos
creencias
Motivación
igualdad
Nota:
en ocasiones como envidia respecto a
los que están económicamente mejor, pero a menudo es un afán de justicia. Porque en un
mundo que proclama la igualdad de los seres humanos, no es extraño que quienes
consumen menos deseen consumir lo mismo que los que consumen más, dado que la
percepción de la desigualdad se llega a percibir como una escandalosa injusticia, que
provoca una profunda insatisfación y al mismo tiempo un impulso para tratar de elevar la
propia capacidad de consumir. Esa aspiración puede estar conectada con la necesidad de
autoestima de las personas que son desiguales por debajo. En tal caso, su afán por elevar
el consumo no sería fruto de una “competición”, sino de un legítimo deseo de disfrutar de
los bienes que se consideran socialmente necesarios para no ver menoscabada la propia
estima personal.
búsqueda de
identidad
Nota:
las motivaciones del consumo, dado que éste tiene
también una función comunicativa, que consiste en que las gentes consumen
determinados productos para comunicarse a sí mismas y a los demás que ellas pertenecen
a un determinado grupo social, que se identifican con tal o cual grupo que tiene una
identidad definida, un “estilo de vida” propio y particular.
afán compensatorio
Nota:
tener una dificultad física, o por pertenecer a una etnia
tradicionalmente rechazada, o situaciones semejantes que se viven con un sentimiento de
inferioridad, es la base de muchos casos de consumo desmesurado. También entrarían en
este rubro los casos en que las personas tratan de consolarse de algún sufrimiento
emocional con el recurso al consumo.
ansia de seguridad
Nota:
también un poderoso impulsor del consumo. A menudo este
afán de seguridad se muestra en personas que compran las marcas más caras y los
modelos más caros y ostentosos de ciertas mercancías. En ocasiones se compran las
marcas más caras por no correr riesgos con marcas más baratas, pues se da por sentado
que lo más caro es mejor y no se tiene tiempo ni paciencia para informarse bien de los
rendimientos de las diferentes marcas. En otras ocasiones se teme ser mal recibido en
sociedad si no se consume lo más costoso y ostentoso, y se compra ese tipo de cosas por
asegurarse una buena acogida social.
necesidad de
experiencias
Meta Economía
oferta de bienes
servicios
Meta política
ampliar las
posibilidades de
consumo
Posición socioeconómico
Nota:
la situación del consumo en el mundo contemporáneo es la peculiar
posición de los consumidores en el sistema socioeconómico. Por una parte, es evidente que los
consumidores actúan influidos por la mercadotecnia y por el resto de la sociedad, porque las
elecciones de consumo son siempre interdependientes y comparativas.
consumidores Influenciados
Mercadotecnia
Sociedad
VALORES
Nota:
desde la idea normativa de justicia podríamos decir que la ética del consumo
debería fomentar esos valores también. Por eso la ética del consumo implica desarrollar la
libertad en el consumo, desarrollando el sentido crítico en los consumidores y eliminando las
barreras que impiden a muchas personas ejercer su libertad a través del consumo
libertad
Nota:
El ciudadano debe
gozar de cierto grado de libertad negativa (de no interferencia) y de libertad positiva (de
participación política), como también de derechos económicos, sociales y culturales. A ello se
une la necesidad de tejer una ciudadanía multicultural, diferenciada y compleja, que acoja en su
seno las diferencias enriquecedoras, así como una ciudadanía de compromiso cívico en
asociaciones y organizaciones.
solidaridad
Nota:
es un valor relacionado con la capacidad de ponerse en el lugar del
otro y de ayudar a quienes están en apuros, contiene exigencias éticas que apuntan a que el
consumo de mercancías ha de ser compatible con un sistema de solidaridad con los menos favorecidos en el que ningún miembro de la sociedad se sienta marginado o excluido
arbitrariamente.
Respeto
Nota:
implica aceptar de buen grado que haya diferentes modos de
vivir y de consumir que son respetables, siempre que no atenten contra los valores básicos de
convivencia. Es preciso respetar plenamente lo que nos diferencia, aunque nos pueda desagradar
en algún momento, porque las diferencias que no implican injusticia son legítimas y
enriquecedoras.
Autonomía del consumidor
Igualdad
Nota:
la igualdad, nuestra época demanda que esa igualdad ya no se
entienda sólo como igualdad política, sino también como igualdad económica.
NIVELES
personal
habitos del consumo
institucional
local
Global
Político
Estado
responsabilidad
social
nacional e internacionales
asumen
sectores
económicos
sociales
ecológico
EQUILIBRIO
Nota:
Sólo si forjamos un nuevo
carácter personal y social predispuesto a no expoliar la naturaleza, sino a restablecer el equilibrio
ecológico, puede darse la respuesta realmente eficaz a la crisis medioambiental en la que estamos
inmersos. Por eso el cuidado del medio ambiente es también un elemento imprescindible de una
ética del consumo.