Infecciones del tracto genital
inferior: afectan a la mucosa
vaginal y a la vulva.
Signos y Síntomas: molestias al orinar (disuria), el
aumento de la frecuencia de las micciones
(polaquiuria), picor o prurito vulvar, dolor a la
penetración (dispareunia), incremento de flujo
vaginal (leucorrea),
Infecciones
vulvovaginales:
Vaginosis bacteriana:
Producida por la bacteria Gardnerella
vaginalis y por otras especies de
bacterias anaerobias. Su cuadro clinico
es relacionada con la EIP., exudado con
un olor característico (olor a pescado).
Los criterios clínicos, sobre los cuales se
establece el diagnóstico son: exudado
vaginal relativamente abundante,
homogéneo, no viscoso, blanquecino,
adherente y maloliente. El tratamiento
se realiza con fármacos antimicrobianos
por vía oral durante una semana o en
forma de cremas vaginales
Vulvovaginitis
candidiásica
Causadas por la especie Candida albicans. Los
factores que están relacionados con esta infección
son: la diabetes, los anticonceptivos orales, los
antibióticos y el embarazo. Las molestias suelen ser
típicas, incluyendo picor, quemazón, irritación y un
exudado vaginal que se adhiere a la mucosa y es de
color blanquecino o amarillento. El diagnóstico es
clínico. El tratamiento se realiza con fármacos
antifúngicos tanto por vía oral como tópica.
Vaginitis por Tricomonas:
La infección por Trichomonas
vaginalis es una de las
enfermedades de transmisión
sexual más frecuentes. Las
molestias más frecuentes son la
leucorrea, disuria, dispareunia y
el picor o prurito vaginal. A la
exploración, la vagina se aprecia
inflamada y el cuello del útero
enrojecido, con una apariencia
clásicamente descrita como
aspecto de "frambuesa". El
tratamiento se lleva a cabo con
antimicrobianos, bien en
monodosis o dosis múltiples cada
8 horas durante una semana.
Úlceras genitales
Enfermedad de transmisión sexual.
Las infecciones que producen este
tipo de úlceras son: infección
genital por el virus del herpes
simple, sífilis (infección producida
por Treponema pallidum),
chancroide (producido por
Haemophilus ducrey) y el
Linfogranuloma venéreo (producido
por la bacteria Chlamydia
trachomatis).
Verrugas genitales causadas por el virus del papiloma
humano
Enfermedad de transmisión sexual causada por el
virus más frecuente. Las verrugas genitales o
condilomas acuminados muestran una superficie de
tipo irregular, similar al aspecto de la de una coliflor,
de color rosado y de tamaño variable; aparecen en la
región genital y perianal. El diagnóstico se realiza
mediante la exploración clínica y la citología con
tinción de Papanicolaou. Hay varios tipos de
tratamientos: medicamentos tópicos, crioterapia,
láser, electrocauterio.
Infecciones del tracto genital
superior: afectan al cuello de
útero (cérvix), al cuerpo del
útero, a las trompas de Falopio y
a los ovarios.
Enfermedad Inflamatoria Pélvica: Síndrome que se presenta cuando los
microorganismos ascienden desde el cuello de
útero y afectan a la mayoría de las estructuras
del aparato genital femenino . Puede provocar:
Endometritis: inflamación
del endometrio.
Salpingitis: inflamación de las
Trompas de Falopio
Ooforitis: inflamación de los
ovarios.
Epidemiología: afección más
frecuente en mujeres por
debajo de los 35 años;
raramente tiene lugar antes de
la primera menstruación
(menarquia) o después de la
menopausia.
Agente Causal:
microorganismos con
mas frecuencia como
Neisseria gonorrhoeae
y Chlamydia
trachomatis.
Los factores de riesgo
relacionados son:
promiscuidad,
enfermedad
inflamatoria pélvica
previa, el uso de
dispositivos
anticonceptivos
intrauterinos DIU y los
abortos
Signos y Síntomas: dolor
en el bajo abdomen,
fiebre, leucorrea y/o
sangrado uterino anormal,
nauseas y vómitos,
vaginosis bacteriana.
Diagnóstico: se basa en el
cuadro clínico y la exploración
física (la palpación del
abdomen y de las estructuras
afectadas suele ser sumamente
dolorosa). Los estudios
microbiológicos permiten
demostrar la presencia de
Neisseria gonorrhoeae o
Chlamydia trachomatis. En
otras ocasiones, se recurre a
pruebas como la ecografía o la
biopsia.
Complicaciones: peritonitis, salpingitis
crónica, con la formación de cicatrices
en las trompas. Entre las secuelas se
encuentran dolor abdominal crónico,
irregularidades menstruales e
infertilidad.
Tratamiento: Uso de antimicrobianos
por vía parenteral (intramuscular o vía
intravenosa), en cuanto se hayan
tomado las muestras correspondientes
para realizar el cultivo microbiológico.