Conjunto de anomalías ocasionadas por una inadecuada
inserción o invasión placentaria y que se asocian con un
incremento notable en la morbilidad y mortalidad para el
binomio
Placenta previa (PP)
placenta que se inserta en el segmento
uterino en el tercer trimestre de la
gestación, y cubre o está próxima al orificio
cervical interno
Vasa previa
Trayecto de vasos sanguíneos fetales sin la protección
habitual de la placenta o del cordón umbilical a través
de las membranas fetales, ya sea a nivel del OCI o por
debajo de la parte fetal que se aboca a la pelvis
Acretismo placentario
Termino general para referirse una
placenta adherente y que se produce
cuando la decidua basal penetra dentro y
a través del miometrio
De acuerdo al grado de invasión puede
dividirse en acreta, increta y percreta
Posibilidades
Implantación baja de la
placenta
La placenta está implantada en el segmento
uterino inferior de modo que el borde de la
placenta no llega al orificio interno, pero se
encuentra en estrecha proximidad al mismo
Placenta previa marginal
El borde de la placenta está en el margen del
orificio interno
Placenta previa parcial
La placenta cubre en forma parcial el orificio Interno
Placenta previa total
El orificio cervicouterino interno está cubierto por
completo por la placenta
Incidencia
Incidencia de PP al momento del parto 0.5% (1 de cada 200)
Incidencia de PP en nulíparas al momento del parto (1 en 500)
Incidencia de PP en multíparas al momento del parto (1 de 20)
45% de las mujeres con hemorragia en el segundo trimestre
tiene diagnóstico de PP por USG.
90% de PP diagnosticadas en el segundo trimestre ya no lo son en el
momento del parto.
Factores de riesgo
Edad materna
avanzada (>35 años)
Multiparidad
Gestación múltiple
Tabaquismo
Consumo de cocaína y
anfetaminas
Antecedente de
placenta previa
El riesgo de recidiva se
multiplica por 5 o por 6
Antecedente de
cesárea
La PP se asocia con acretismo en el 5% de
los casos sin cesárea, y hasta en el 40%
cuando existe el antecedente de 3
cesáreas previas
Antecedente de legrado por
aspiración en un aborto
espontaneo o inducido
En embarazos con placenta
normoinserta el riesgo de invasión
del trofoblasto al miometrio es de
1 en 2500
Patogenia
El riesgo de placenta previa aumenta en forma directa con el número de cirugías
uterinas a las que se haya sometido antes la paciente
Aumento en la cantidad de cesáreas
El riesgo de placenta previa en un segundo embarazo,
después de un primer parto por cesárea, es de 1-4%
El riesgo aumenta a casi 10% en
pacientes con cuatro o más cesáreas
anteriores
Se ha sugerido que las placentas previas que se identifican en el segundo
trimestre en pacientes con un parto previo por cesárea tienen menor
probabilidad de resolverse a medida que progresa el embarazo
Diagnóstico
Ante la sospecha de PP NO realizar TACTO VAGINAL
Ecografía
Transabdominal
Transvaginal
Permite delimitar adecuadamente el borde placentario
inferior y su relación con el orificio cervical interno
El diagnóstico de inserción baja de la placenta se realiza cuando el borde placentario se encuentre a
menos de 20 mm del OCI, sin llegar a cubrirlo; y el de placenta previa cuando el borde placentario
cubre o rebasa el OCI.
Tratamiento
Toda paciente que presente sangrado transvaginal (en cualquier cantidad) y cuente con el diagnóstico de PP debería ser
manejada de forma intrahospitalaria para realizar una vigilancia estrecha del binomio y contar con componentes
sanguíneos compatibles y disponibles, en caso de ser requeridos
recomendar que todas las mujeres con PP y en riesgo de hemorragia anteparto,
debieran ser motivadas a permanecer en un lugar cercano al sitio en el cual se
otorgará la atención del nacimiento.
Este confinamiento debería abarcar toda la
duración del tercer trimestre
medicamentos tocolíticos para el manejo de sangrado en PP
monitorización de la hemoglobina, manteniéndola por valores arriba de 11 mg/dL y pruebas de vigilancia fetal (registro
cardiotocográfico) al menos una vez por semana.
Se recomienda iniciar todas aquellas medidas en la paciente hospitalizada con PP que mejoren la circulación de sangre en
extremidades
promover la movilización
vigilar el estado de hidratación
uso de medias compresivas
Para los casos en los cuales exista sospecha de acretismo placentario, el cirujano debería considerar realizar la incisión
uterina en un sitio distante a la placenta y que al mismo tiempo permita la extracción del feto.
no forzar el alumbramiento puede asociarse con una
menor morbilidad para la mujer
Clínica
fenómeno más característico de la placenta previa es la
HEMORRAGIA INDOLORA
la hemorragia inicial rara vez es tan profusa como
para resultar letal
Es típico que la PP se presente con hemorragia vaginal indolora, en
general en el 3er. Trimestre. (La falta de dolor diferencia al PP de
desprendimiento placentario)
En algunas mujeres, en particular aquellas con una
placenta implantada cerca del orificio cervicouterino, pero
no sobre el mismo, la hemorragia no aparece sino hasta el
inicio del trabajo de parto
cuando la placenta está localizada sobre el orificio
interno, la formación del segmento uterino inferior y la
dilatación del orificio interno dan por resultado de
manera inevitable desgarro de las fijaciones placentarias
La hemorragia procedente del sitio de implantación en el
segmento uterino inferior puede continuar después del
alumbramiento porque dicho segmento se contrae poco
La delgadez del segmento
uterino inferior impide que
se contraiga para reducir el
sangrado
Asociación con placenta acreta, percreta e increta.
Alta sospecha de PP en pacientes con
sangrada después de las 24 semanas.
1/3 acude por sangrado
antes de la semana 30
1/3 entre la semana
30-36
1/3 después de la
semana 36
10% llegan a término sin ningún
episodio de sangrado.
Otro dato de sospecha es la presencia de sangrado transvaginal después del coito