Consecuencias de la obesidad en la infancia y
adolescencia
inmediatas
Con el simple hecho de presentar sobrepeso, se observa un incremento de las alteraciones
ortopédicas como pie plano, resistencia a la insulina, incremento de andró- genos, aumento de
colesterol, lipoproteínas de baja densidad y triglicéridos, así como alteraciones pulmonares,
menstruales, diabetes
mediatas
En un lapso de dos a cuatro años posterior al inicio de la obesidad, se incrementa el riesgo de
presentar, además de las manifestaciones inmediatas: hipertensión arterial (10 veces más),
hipercolesterolemia (2.4 veces más), lipoproteínas de baja densidad altas (tres veces más) y
lipoproteínas de alta densidad bajas (ocho veces más).
tardias
Si la obesidad persiste hasta la edad adulta, además del agravamiento de las complicaciones
mediatas, se tendrán incidencias y prevalencias altas de enfermedades coronarias, hipertensión
vascular, enfermedad renal vascular, ateroesclerosis, artritis y ciertas neoplasias que son las que
elevan la morbilidad y explican la mortalidad en la vida adulta
La Organización Mundial de la Salud (OMS), ha definido a la
obesidad como la condición en la cual el exceso de tejido
adiposo afecta de manera adversa la salud y el bienestar
identificación de riesgo, para intervención, evaluación de impacto sobre el estado
nutricio o salud, para exclusión de ciertos tratamientos.
prevencion
MEDICION
ANTROPOMETRICAS
La evaluación antropométrica es la medición de las dimensiones físicas del cuerpo humano en
diferentes edades y su comparación con estándares de referencia
El uso de puntos de corte de distintos indicadores antropométricos, basados en las distribuciones de
los indicadores en diferentes poblaciones, se ha generalizado debido a la ausencia de criterios claros
para definir sobrepeso y obesidad en la infancia, tomando en cuenta la adiposidad corporal y su
relación con eventos de salud
A la fecha, varios grupos han recomendado al IMC como el indicador de elección
para evaluar obesidad en niños y adolescentes de dos a 19 años de edad.29,32-34
El motivo para hacer esta recomendación es que el IMC expresa la relación entre el
peso y la estatura como una razón, puede obtenerse fácilmente, tiene una
correlación fuerte con el porcentaje de grasa corporal (particularmente en los
valores extremos), su asociación con la estatura es débil, e identifica
correctamente a los individuos con mayor adiposidad en el extremo superior de la
distribución (≥ percentil 85 para edad y sexo)
IMC
Se correlaciona positivamente con la adiposidad corporal en niños y adolescentes Se correlaciona
positivamente con el indicador “peso para la estatura” Se correlaciona con el IMC en la edad adulta El
IMC alto predice adiposidad, morbilidad y muerte futuras Proporciona, en una misma gráfica, datos
para adolescentes que no se tenían con las tablas de crecimiento basadas en peso y estatura
Permite dar seguimiento al sobrepeso, etc
Para usar adecuadamente el IMC es indispensable contar con mediciones precisas tanto del peso
como de la estatura, pues pequeños errores en cualquiera de estas mediciones (o en ambas) pueden
resultar en modificaciones importantes en el cálculo del IMC que incluso pueden implicar errores en
la ubicación de los niños, particularmente en valores cercanos a los puntos dcorte o a los cambios de
percentil.
En las tablas de IMC para edad y sexo
de CDC- 2000, se usan criterios
percentilares para definir riesgo de
sobrepeso y sobrepeso, de tal manera
que los valores iguales o mayores del
percentil 85 y menores del percentil 95
definen riesgo de sobrepeso y los
valores iguales o mayores del percentil
95 definen sobrepeso en niños y
adolescentes
En México, existen unas tablas de distribución percentilar del perímetro de cintura para niños de 6 a
10 años de edad.72 El perímetro de cintura y el índice cintura/estatura prometen ser un indicador
complementario en la identificación de obesidad en población pediátrica en un futuro, cuando se
cuente con valores de referencia (específicos para edad, sexo, posiblemente estatura, e incluso
percentiles de IMC), dado que se asocian con riesgos futuros
Desde una perspectiva teórica, el punto de corte percentilar idóneo es el punto de la distribución del
IMC, donde el riesgo a la salud por obesidad empieza a aumentar de manera pronunciada y no
necesariamente los puntos de corte establecidos por el Grupo de Trabajo
Por lo anterior, al evaluar el estado nutricio de un niño con sobrepeso u obesidad por IMC, es
importante buscar la presencia de alteraciones a nivel de diferentes órganos y sistemas y de ser
posible incluso las psicológicas, con el objetivo de intervenir oportunamente y prevenir el desarrollo
de enfermedades futuras