Las civilizaciones se desarrollan con la escritura, yes el tránsito de la comunicación
oral a la palabra escrita lo que desarrolla una civilización (cfr. Havelock, 1973).
La ruptura se produce a mediados de nuestro
siglo, con la llegada del televisor y de la televisión
El telespectador es más un animal vidente que un animal
simbólico. Para él las cosas representadas en imágenes
cuentan y pesan más que las cosas dichas con palabras.
Lo que hace único al homosapienses su capacidad simbólica; lo que indujo a Ernst
Cassirer a definir al hombre como un «animal simbólico».
Animal symbolicum comprende todas las formas de la
vida cultural del hombre. Y la capacidad simbólica de los
seres humanos se despliega en el lenguaje, en la
capacidad de comunicar mediante una articulación de
sonidos y signos «significantes», provistos de significado.
El progreso tecnológico
Todo progreso tecnológico, en el momento
de su aparición, ha sido temido e incluso
rechazado.
El invento más protestado fue,
históricamente, el de la
máquina, la máquina
industrial.
El nuevo soberano es ahora el ordenador. Porque el ordenador (y con él la digitalización de todos
los medios) no sólo unifica la palabra, el sonido y las imágenes, sino que además introduce en los
«visibles » realidades simuladas, realidades virtuales.
El término cibernética fue
acuñado por Norbert Wiener
para denominar el «control y
la comunicación en el animal
y en la máquina » (es el título
de su libro de 1948).
La llamada realidad virtual es una irrealidad
que se ha creado con la imagen y que es
realidad sólo en la pantalla. Lo virtual, las
simulaciones amplían desmesuradamente las
posibilidades de lo real; pero no son
realidades.
El vídeo-niño
«Al principio fue la palabra»: así dice el
Evangelio de Juan. Hoy se tendría que
decir que «al principio fue la imagen»
Alberoni (1997):
La palabra es un «símbolo» que se
resuelve en lo que significa, en lo
que nos hace entender.
La imagen abre una
ventana hacia el mundo,
algo que la descripción
escrita no puede igualar
la televisión está produciendo una
permutación, una metamorfosis,
que revierte en la naturaleza
misma del homo sapiens.
El cambio de agujas se ha producido
por el hecho de informarse viendo.
La televisión no es un anexo; es sobre
todo una sustitución que modifica
sustancialmente la relación entre
entender y ver.
Progresos y regresiones
La televisión beneficia y perjudica, ayuda
y hace daño. No debe ser exaltada en
bloque, pero tampoco puede ser
condenada indiscriminadamente.
Frente a estos progresos hay una
regresión fundamental: el
empobrecimiento de la capacidad
de entender. 43
A diferencia de los progresistas del momento, los
progresistas del pasado nunca han fingido que no
entendían que todo progreso de la democracia
La advertencia es, pues, que un aumento
cuantitativo no mejora nada si no está
acompañado de un progreso sustancial.
Progresar es sólo «ir hacia
delante» y esto comporta un
crecimiento.
La televisión «estimula»
El empobrecimiento de la
capacidad de entender
La televisión produce imágenes yanula los
conceptos, yde este modo atrofia nuestra
capacidad de abstracción y con ella toda
nuestra capacidad de entender
La televisión invierte la evolución de lo sensible
en inteligible y lo convierte en el ictu oculi, en un
regreso al puro y simple acto de ver.
El homo sapiens debe todo su saber
y todo el avance de su entendimiento
a su capacidad de abstracción.
El homosapiens es suplantado por el homovidens
Los llamados primitivos son tales porque
-fábulas aparte- en su lenguaje destacan
palabras concretas: lo cual garantiza la
comunicación, pero escasa capacidad
científico-cognoscitiva.
Contra-deducciones
La invención de la radio deslumbró a todos. Responder invocando a inexistentes
satanizadores es, pues, una respuesta vacía que evade el problema propuesto.
Una de las consecuencias imprevistas de la sociedad industrial ha sido la polución, la
intoxicación del aire y del ambiente.
La solución del problema debemos buscarla en alguna síntesis armónica. Aunque de
momento los hechos desmienten, de modo palpable, que el hombre que lee y el homo
videns se estén integrando en una suma positiva.
el hombre que lee y el hombre que ve, la cultura escrita y la cultura audio-visual, dan
lugar a una síntesis armoniosa.
la imagen no da, por sí misma, casi ninguna inteligibilidad. La imagen debe ser
explicada; y la explicación que se da de ella en la televisión es insuficiente.
Internet y
«cibernavegación-
Internet, la «red de las redes» es un prodigioso instrumento multitarea: transmite
imágenes, pero también texto escrito; abre al diálogo entre los usuarios que se buscan
entre ellos e interactúan; y permite una profundización prácticamente ilimitada en
cualquier curiosidad
Si Internet es entretenimiento y se utiliza como entretenimiento,
entonces ya no es tan seguro que venza a la televisión
El ordenador. Además, el ordenador es una máquina
mediante la cual pensamos, y que modifica nuestro
modo de pensar, lo que no significa que el hombre
común se abalanzará sobre el ordenador personal
abandonando el tele-ver.
Las nuevas fronteras son Internet y el
ciberespacio, y el nuevo lema es «ser digitales».
La televisión debe ofrecer productos de masa, productos que lleguen a
un público muy numeroso (y al que presenten numerosos anuncios
publicitarios). Por el contrario, Internet proporciona productos a
medida de diferentes intereses.