usos médicos dados a las benzodiacepinas y a las fenotiacinas, atención en urgencias aplicada al intoxicado por estos fármacos, farmacocinética y farmacodinamia de los mismos.
Las benzodiacepinas son medicamentos que disminuyen la
excitación neuronal y que tienen un efecto antiepiléptico,
ansiolítico, hipnótico y relajante muscular.
Se utilizan como
tratamiento de:
Ansiedad generalizada.
Insomnio.
Fobias.
Trastorno obsesivo
compulsivo.
Trastornos afectivos.
Esquizofrenia.
Ciertas urgencias psiquiátricas, como la agitación
psicomotriz, el estrés ambiental o los trastornos de
la personalidad.
Delirium tremens, para prevenir
la agitación y las crisis
convulsivas.
tipos de benzodiacepinas
Hidrosolubles y lipisolubles
De rápida o lenta acción.
De vida media, corta y ultracorta.
De alta o de baja potencia.
Se pueden administrar por vía
oral, sublingual, intramuscular o
intravenosa.
Riesgos
Pueden lentificar el funcionamiento
psicomotriz, de ahí que puedan
provocar:
Somnolencia.
Dificultades en la atención.
Problemas de memoria
Dificultades de concentración.
Dependencia de benzodiacepinas
Además de los efectos inmediatos de las
benzodiacepinas, a medio y largo plazo
pueden provocar dependencia.
Los riesgos derivan de su capacidad
para producir inducción enzimática
en el hígado lo que se traduce en
tolerancia.
para conseguir el mismo efecto hay que ir
aumentando progresivamente la dosis.
si se interrumpe su administración aparece el
síndrome de abstinencia.
¿Durante cuánto tiempo
mantener el tratamiento?
Para evitar problemas de dependencia no se debe
exceder el tiempo recomendado de tratamiento.
“En caso de insomnio, los tratamientos no
deben durar más de cuatro semanas,
debiendo fraccionar el uso de
benzodiacepinas en cuanto sea posible.
¿Que son las fenotiazinas?
Las fenotiazinas forman la estructura química de un
grupo de fármacos antipsicóticos, utilizados para tratar
diversos trastornos mentales y emocionales graves
así como para reducir las náuseas y vómitos
(fármaco antiemético).
Características
Las fenotiazinas, además de formar parte de un grupo de
fármacos antipsicóticos (por su estructura), son
antieméticos de uso general (impiden el vómito o las
náuseas).
Son eficaces en una gran variedad de
estímulos de intensidad baja o moderada
Existen tres tipos de fenotiazinas
según su estructura: las fenotiazinas alifáticas, con
fármacos como la Clorpromazina y la Levopromazina
las fenotiazinas piperidínicas
(Tioridazina)
las fenotiazinas piperazínicas (Flufenazina,
Perfenazina y Trifluperazina).
Efectos secundarios
Las fenotiazinas pueden producir
diversos efectos adversos, tales como: