El propósito de la política fiscal es darle mayor estabilidad al sistema económico al mismo tiempo que
se trata de conseguir el objetivo de ocupación plena.
La política fiscal tiene dos componentes:
El gastó publico:
Se define como el gasto que realizan los
gobiernos a través de inversiones
públicas.
Los ingresos publicos:
La gestión tributaria mide el conjunto de
acciones en el proceso de la gestión pública
vinculada a los tributos que aplican los
gobiernos en su política económica.