CASO
•El
suicidio es un problema que cada día aumenta más, este es el caso de Renata una
joven de 16 años, ella tiene una mamá soltera, muy despistada por cierto, por
la razón de que ahora solo le importa su relación con su novio David. No paso
mucho tiempo cuando su mamá lo llevara a vivir a su casa y posteriormente se
casaron, Renata estaba muy contenta porque pensó que la vida de su mama
cambiaría y ahora serían una nueva familia feliz, sin embargo no fue así David
era una bella persona al principio pero después cambió, empezó a tratar mal a
Renata diciéndole gorda, Renata sufrió de obesidad después de que su mamá se
casó problema del cual David se colgó para discriminarla y burlase de ella ,
Renata se lo conto a su mamá pero obviamente no le creyó y lo único que le dijo
fue: déjame descansar, no estoy para escucharte estoy cansada. Renata estaba a
punto de entrar a la preparatoria así que preparo sus cosas para el inicio de
clases. En su primer día de clases, sentía mucho miedo, estaba nerviosa y a la
vez emocionada de los amigos que haría. Ella no se imaginaba que en su primer
día de clases habría muchas niñas delgadas que veían a Renata como bicho raro y
enseguida empezaron a cuchichear sobre ella, no tardo mucho cuando sus
compañeras la empezaran a poner apodos ofensivos por su peso. Sin duda su vida
era horrible iba a la escuela y la discriminaban, llegaba a su casa y su padrastro
David la maltrataba, todas las noches su mamá llegaba
cansada y no le preguntaba cómo le había ido, simplemente cenaba y se iba a
dormir. Renata hablaba con ella pero era como hablar con la pared, todas las
noches se encerraba en su cuarto para llorar profundamente y así desahogarse un
poco, hasta que un día… sus compañeras la empujaron al lodo y le gritaron
¡ballena! , Renata corrió de ahí directo a su casa cuando David le ponía el
cuerno a su mamá con una vecina, Renata los vio y David la metió a su casa y la
comenzó a golpear y le dijo: si dices algo de lo que viste, no te la vas a
acabar, Renata pensó: ya no quiero vivir, corrió a su cuarto y sin pensarlo
abrió el cajón de las medicinas, y se tomó la mitad de un bote de pastillas,
provocándose una sobredosis que a los pocos minutos le quito la vida.